El Chapo pagó por tener sexo con niñas en «múltiples ocasiones» y las drogó previamente con «sustancias en polvo», de acuerdo a los testimonios escritos y reservados que no fueron presentados ante el jurado durante el proceso y que el juez Brian Cogan, que lleva el caso en Nueva York, ha ordenado hacerlos públicos tras la queja de varios medios. El abogado del Chapo, Eduardo Balarezo, comunicaba el sábado en un correo que el «Gobierno ha presentado públicamente documentos que contienen información extremadamente inmoral» sobre su cliente y considera «desafortunado» que ese material se haya revelado «justo antes de que el jurado empiece sus deliberaciones». De acuerdo a un testigo, una intermediaria del El Chapo conocida como comadre María le enviaba habitualmente fotografías de niñas para que el narcotraficante o uno de sus subordinados tuvieran sexo con ellas en los ranchos de su propiedad a cambio de unos 5.000 dólares (4.400 euros aproximadamente). El testigo que le ha explicado esta información a la Fiscalía, el colombiano Alex Cifuentes, exsecretario del Chapo, tuvo sexo en «tres o cuatro ocasiones» con niñas de unos 15 años, mientras que «vio al acusado hacer lo mismo en múltiples ocasiones» con niñas de trece años, recoge el documento. Cifuentes presuntamente ayudó a El Chapo a drogar a las menores con las que quería acostarse «poniendo una sustancia en polvo en sus bebidas» y, según recordó, a las niñas más pequeñas las llamaba «vitaminas» porque creía que tener actividad sexual con ellas «le daba vida».
