El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) mostró ayer su «consternación» por el aumento del número de personas muertas o desaparecidas mientras intentaban alcanzar las costas mediterráneas españolas, que superan 30 en lo que va de año, casi la mitad de las ocurridas en todo 2016. La Agencia ha lamentado en una nota de prensa el naufragio acaecido el pasado miércoles cerca de la costa marroquí, en el que nueve inmigrantes subsaharianos desaparecieron y otros dos fueron rescatados cuando se dirigían hacia Cádiz a bordo de una patera.

Según recuerda, el Mediterráneo fue el pasado año «la frontera marítima más mortífera a escala global», con el «triste récord» de haber sido testigo de la desaparición o fallecimiento de 5.000 personas, principalmente en la ruta central, entre Libia e Italia.