El exgerente del Hospital General de Valencia y sobrino del exconsejero valenciano Rafael Blasco, actualmente preso por el desvío de dinero destinado a ayudas humanitarias, está en el centro de de una trama de adjudicaciones irregulares a diversas empresas en las que su familia tendría intereses. La Policía Nacional lo detuvo ayer junto con otros nueve supuestos implicados.