Leo con satisfacción en la contraportada del semanario católico Alfa y Omega nº 1.150, este titular: “Diría a los políticos que, antes de legislar, den un paseo por paliativos”. Expresando la necesidad de visitar hospitales y residencias donde se atienden, se cuidan y minimizan el dolor de las personas enfermas en ese “estadio último” de la vida; reconocido como “cuidados paliativos”. A fin de ver y valorar los trabajos que realizan y necesitan los servicios sanitarios..., antes de legislar lo que pretenden: “aplicar la eutanasia”. Visita que debería ser de obligado cumplimiento.
Pero también diría, para no olvidar que fue nuestra Nación y valorar más su Historia, defendida y mantenida con tantos sacrificios ejercidos por nuestros antepasados a lo largo de ella..., también deberían visitar nuestros políticos, ciertos museos. Tales como el Museo del Ejército, el de la Armada, etc., sin dejar pasar una “visita guiada” a este singular edificio del Escorial. Para ver hasta donde llegó nuestra Nación y la función-misión que ejerció en el mundo. Sin duda evitaríamos frases tan impropias y de graves consecuencia (como percibimos) como esta: “España, es un concepto, discutido y discutible”. Al respecto viene a mi memoria, la necesidad, no contemplada ni valorada suficientemente, de recibir una fuerte y extensa preparación- vocación para ejercer tan delicada y responsable misión de dedicarse a la política. Para regentar con eficacia y administrar responsable y eficientemente nuestra querida Nación. Bien sea dentro de sus niveles más altos, como desde su administración municipal. Tal como se hace con todos los servicios públicos: sean de Defensa, Fuerzas de Orden Público, Servicios de Emergencias y de todo el entramado de nuestra Sanidad e Investigación. Esta es nuestra asignatura pendiente.
