Bueno la que hay liada con el cambio climático, que lo tenemos ya hasta en la sopa, la verdad que a mí ya me tiene un poco harto de estar viendo todos los día en los informativos, lo que contaminamos o dejamos de contaminar. Desde que el animal humano salio de las cavernas, ya se comenzó a contaminar, y, es que por la sencilla razón de que dicho animal no estaba previsto que surgiera. Siempre he pensado que nosotros somos un error de la naturaleza, el homo sapiens, no estaba programado para existir en este planeta llamado Tierra.

Pero ocurrió y aquí estamos. De todos los animales que existen, el hombre es el animal más destructivo que ha existido y existe. Y lo peor de todo es que no nos queremos dar cuenta que nosotros formamos parte de la Naturaleza, y si vivimos en este planeta, es por que ella lo permite. Como casi todo el mundo sabe, el agua es elemento más poderoso de la misma, la que más destrozos causa, es imparable y no se puede dominar, con razón la mente más brillante que ha existido y existirá, Leonardo da Vinci, se refirió a ella como "la sangre de la naturaleza".

Pero por mucho que las personas queramos hacer por reciclar por tratar de usar productos ecológicos, por lo que se le ocurra a ustedes, si de verdad, por los gobernantes y sobre todo por EEUU y China, que son los dos países que más contaminan, no toman las medidas para tratar de revertir la situación, me temo que la cosa ira de mal en peor. He visto muchas películas apocalípticas, en las cuales se puede ver como la Tierra queda devastada, y solamente sobreviven en el mejor de los casos un puñado de humanos, una de la más famosas, fue la interpretada por el gran actor Charlton Heston, titulada El último hombre vivo, la cual se rodó en 1971.

Pues seguramente de seguir así, la Naturaleza, nos pondrá en nuestro sitio, y nos veremos como se vio Charlton Heston, en la cinta. Porque por mucho que queramos nosotros no podemos dominarla, ella siempre reclama y coge lo que por derecho le corresponde. Que nos estamos cargando el planeta, de eso no les quepa ninguna duda, seguramente el que suscribe y los que lean este artículo, ya no estaremos para verlo, pero las próximas generaciones las van a pasar más putas que canutas. Todavía estamos a tiempo, pero la cuenta atrás ya ha comenzado y si no se le pone remedio, esta va a ser irreversible.