Morticia, Miércoles, Gómez y Pugsley se pasearán por las tablas del Gran Teatro del 23 al 26 de mayo con el montaje musical La familia Addams, ese conocido clan que se alegra cuando alguien muere, que come vísceras y hace el amor en el cementerio. Todos ellos protagonizan un espectáculo que lleva dos años girando con gran éxito por España de la mano de la promotota Lest Go (The Hole, Dirty dancing y que se convierte en una fiesta del humor y de la música apta para un público familiar, que pasará un divertido rato, según han señalado esta mañana dos de su protagonistas, las actrices Carmen Conesa y Lydia Fairén, y el coordinador de la gira, Carlos Alexandre, durante su presentación.

Con música en directo, en este montaje, la pequeña Miércoles ha crecido y ahora es una bella joven que se enamora de un chico "normal", Lucas Beineke, y ambos deciden reunir a las dos familias en una hilarante noche en casa de los Addams, lo que provoca más de una situación extrema.

Carmen Conesa ha habado de que esta "metamorfosis" -convertirse en Morticia le lleva una hora y media- ha sido "un reto", pero también "un regalo", reconociendo que todo ese maquillaje y vestuario "ayudan a la interpretación en el escenario, a ofrecer lo que el mundo espera, porque, de alguna manera, son iconos que todos tenemos en la cabeza", ya que estos personajes han pasado por el cine, la televisión o el cómic.

"Creo que somos bastante fieles a esos personajes" en este montaje, que se acerca más al teatro musical que a un musical propiamente dicho, ya que "el libreto y los actores tienen mucho peso", ha continuado la actriz. Así, las canciones funcionan como monólogos que hacen avanzar las escenas, y las letras poseen muchos gags, en una adaptación libre que se ha acercado mucho al publico español y a su momento social y político, creando más "empatía" con el espectador. Pese a que son "raros" el publico se siente muy identificados con ellos, ha apuntado Conesa, que ha valorado especialmente que la música sea en directo, "lo que es una alegría tanto para los actores como para los espectadores".

Un total de 50 personas, 20 de ellos actores, viajan en esta gira, que necesita de tres grandes camiones para transportar una escenografía que goza de recursos que transforman el escenario sin que apenas se de cuenta el espectador.

Por otro lado, este montaje está adaptado a personas con discapacidad visual y auditiva, que podrán disponer de una aplicación que les ayude a ver y oír el espectáculo.