El Ayuntamiento de Córdoba se ha propuesto diseñar un plan de gestión del casco histórico en los próximos tres años y para ello, el próximo 14 de octubre constituirá una comisión de trabajo en la que participarán treinta colectivos (asociaciones vecinales, de hosteleros, empresarios, asociaciones de comercio, construcción, artesanos, ampas concertada y pública, informadores turísticos, el Cabildo, la Universidad, el Palacio de Congresos, museos, taxi, Fundación Cajasur, cofradías, Amigos de los Patios, Círculo de la Amistad, Hospital Cruz Roja y federación de peñas) para definir y consensuar las líneas generales que posteriormente trasladará a un documento una mesa técnica más pequeña. Los colectivos tendrán voz, pero no voto, por lo que se intentará trabajar el consenso si bien el informe resultante no será vinculante a la hora de elaborar el plan.

La concejala de Patrimonio, Laura Ruiz, ha informado esta mañana de la formación de esta comisión temporal, que se reunirá probablemente cada dos meses y que Ruiz quiere que sea mucho más práctica y dar más resultados que la que se creó en el mandato anterior. Al cierre de la comisión, se elaborará una memoria que servirá como directriz para el plan que se enviará a la Unesco para que este órgano le dé el visto bueno.

El próximo lunes, la junta de gobierno local aprobará la creación de esta comisión y posteriormente, el Pleno tomará conocimiento. Entre los objetivos marcados por el Ayuntamiento como prioridades que debe reflejar el plan están "garantizar la preservación del casco histórico y de la zona Patrimonio de la Humanidad, fortalecer la singularidad del mismo, compatibilizar los intereses de los usuarios, visitantes y vecinos, moderar el impacto de las actividades mediante la reorganización y distribución de eventos en todo el espacio que abarca el casco para que no se concentre la actividad solo en una zona y establecer un marco para normalizar y regular otros planes sectoriales de turismo, movilidad o cultural.

Según Ruiz, el plan de gestión deberá aplicar los criterios que prevé la Unesco tras analizar posibles conflictos que se puedan dar y diagnosticar la situación y tendencias del casco para trazar acciones estratégicas de futuro.

La mesa de trabajo podrá recibir a agentes y técnicos a petición de sus miembros para conocer aspectos concretos. Según Ruiz, de momento, contará con una dotación económica en el presupuesto del año próximo únicamente para la gestión administrativa del mismo.