Un total de 50 familias se han visto beneficiadas de las ayudas a la adecuación funcional básica de sus viviendas, gracias al programa que el Ayuntamiento de Cabra a través de su Área de Urbanismo puso en marcha en el año 2016 con una partida presupuestaria de 40.000 euros y que se ha viso ampliada en 5.000 euros.

Estas se entregaban en el salón de sesiones del consistorio por el alcalde Fernando Priego (PP) y la delegada municipal de Urbanismo, Carmen Granados (PP), quiénes subrayaban que este tipo de ayudas están destinadas a personas mayores de 65 años de edad y personas con discapacidad o dependientes a través de tres líneas. Una primera para la adaptación de viviendas en mejoras en los cuartos de baño, platós de duchas, el ancho de las puertas para facilitar el acceso de los dependientes o la adquisición de dispositivos como compra de grúas de movilidad y otra para la adquisición de una serie de elementos necesarios para las funciones básicas de la vida diaria, que en el caso de las primeras serán de hasta mil euros y de las segundas hasta 500 euros.

La tercera de las líneas está destinada a ayudas de carácter extraordinario para sufragar el coste de las obras o instalaciones precisas para la recuperación de la habitabilidad funcional de la vivienda de uso habitual y permanente, cuya pérdida derive de una catástrofe o siniestro grave.

Todo ello como indicaban el primer edil y la delegada municipal de Urbanismo, con el fin de mejorar las viviendas y la calidad de vida de estos egabrenses, mostrando su compromiso por mantener estas ayudas en el próximo ejercicio del 2019 a fin de que puedan atenderse tanto aquellas solicitudes que en esta ocasión han quedado fuera por falta de disponibilidad presupuestaria como aquellas otras familias que, cumpliendo con los requisitos que se fijen, lo soliciten.

A estas ayudas, de las que ya se han beneficiado desde el año 2016 más de un centenar y medio de familias, se tiene que sumar la exención de las licencias de obra para aquellas obras cuyo presupuesto sea inferior a los 3.000 euros y para lo que se solicita el estar empadronados en la localidad y destinar las ayudas, al domicilio en el que se reside habitualmente y no para una segunda residencia.