Partido revelación del último cuarto de hora, Ciudadanos se ha encaramado a la segunda plaza en intención directa de voto en unas elecciones generales y a la cuarta en escaños, según el Barómetro Político del Gesop. Su presidente, Albert Rivera, explicó el lunes a este diario el por qué de ese ascenso, sus propuestas y sus planes.

--¿Cómo se explica un crecimiento tan meteórico en solo cuatro meses, similar al de Podemos?

--El país está cambiando mucho. Los de Podemos son esprínters que van a caballo del legítimo cabreo ciudadano; nosotros somos corredores de fondo. Hasta diciembre no anunciamos que iríamos a las generales, y desde entonces, criticando lo que ha pasado, planteamos un debate más sereno, con alternativas a las recetas de PSOE y PP. España va sí o sí a un modelo de cuatro partidos, al menos a corto plazo. El bipartidismo como lo hemos entendido ha muerto.

--Allí donde varios partidos pugnan por la primera plaza se complica la gobernabilidad y se imponen pactos entre más de dos fuerzas. ¿Ciudadanos se ve en cualquier alianza?

--No descarto ninguna. En España hay que acabar con la lógica de los bandos y empezar a entender que quien se sienta en el escaño de enfrente no es tu enemigo, sino el representante de un compatriota. Vamos a alianzas a tres, y una reforma electoral, según el Barómetro del Gesop, no se podría aprobar con el apoyo de solo dos partidos. Las leyes importantes del país requerirán de consensos más amplios, y un pacto nacional sobre educación, por ejemplo, sería aconsejable que lo firmásemos los cuatro. Para España, eso puede ser un caos, como en Italia, o una oportunidad. Hay que cambiar el chip, y los partidos nuevos como Ciudadanos tenemos un doble reto: cambiar las reglas de juego, para que la gente vuelva a creer en la política, y garantizar la estabilidad. Frente a la prepotencia de mayorías absolutas, ha llegado la hora de la generosidad y la humildad.

--¿Es Ciudadanos el Podemos de derechas con el que soñaba el Ibex?

--En absoluto. Nacemos de la sociedad civil, como Podemos, y con ellos y muchísimos españoles compartimos algunos diagnósticos sobre la corrupción y las injusticias sociales. Y tampoco somos un partido de derechas: en Europa estamos en el grupo demócrata liberal...

--Ahí han evolucionado, porque antes se asociaron a Libertas, vinculado a la ultraderecha europea.

--Sí, sí, reconocimos que fue un error, pero nuestro programa se ubica en el espacio de centro. Prohibir que los bancos condonen deudas a los partidos y aumentar el control fiscal de las grandes empresas no son iniciativas gratas para el sistema actual. Lo que sucede es que muchos ven en Podemos el peligro de llevar a España a los escenarios griego o venezolano. Y Ciudadanos garantiza la estabilidad, mejorando lo que no ha funcionado pero sin romper el marco constitucional ni abandonar Europa y el euro.

--Descríbame el modelo federal que Ciudadanos propone para España.

--Sería un modelo federal como el de Alemania o Austria. Hay que diferenciar nítidamente las competencias de cada Administración, aclarar cómo se financian y cerrar el desarrollo autonómico con más coordinación territorial. Las autonomías deben participar la recaudación, siempre al servicio de la caja común del Estado. España debe asumir que es un país diverso, pero unido.

--Lleva tiempo picando piedra por toda España, en ciudades y platós de televisión. Cuesta creer que no vaya a encabezar la candidatura de Ciudadanos a la Moncloa...

--Aún no he decidido si aspiraré a esa candidatura porque en mayo hay unas municipales...

--¿Cree incompatible ser candidato al Parlamento catalán y a la Moncloa?

--Es compatible política y jurídicamente, pero antes habrá que valorar las elecciones de mayo y saber cuándo son las generales, que aún no tienen fecha.

--Las nuevas fuerzas políticas también resultan propulsadas por la sucesión de escándalos de corrupción. El último, el caso Rato ...

--La imagen de Rato entrando en un coche detenido por la policía es el símbolo del final de una etapa política. Fue el vicepresidente de Economía y director del FMI, pero también presidente de Bankia y beneficiario de la amnistía fiscal. Rato representa la cara y la cruz del milagro español. No disfruto viendo al exvicepresidente o a expresidentes de la Generalitat o de la Junta andaluza detenidos o declarando ante un juez, pero estoy orgulloso de que la justicia española y la policía actúe te llames como te llames. Debemos elevar el listón ético, porque esto no es una cuestión del PSOE contra el PP, es un problema de España.

--¿Cuáles son los ejes de su reforma fiscal?

--Habrá solo dos tipos del IVA, más bajos que los actuales: el general será del 18% y el reducido, del 7%. Nuestra propuesta es rebajar el IRPF a las clases medias y trabajadoras, simplificar tramos y ajustarlos a la renta para evitar saltos de tarifa. Con la reactivación del consumo que implicará esta reforma fiscal se mantendrá la recaudación. No prometemos rebajas de tipos que no podamos cumplir, pero sí premiar a los que tributan y castigar a los defraudadores.

--Aunque los nuevos partidos pretendan superar el eje ideológico izquierda-derecha, los votantes tienen derecho a conocer los postulados de cada uno. ¿En Ciudadanos son republicanos o monárquicos?

--Al nacer como partido en el 2006, no tuvimos que afrontar ese debate en la transición. Yo no soy monárquico, soy de principios republicanos, pero resultaría muy útil tener un jefe del Estado que sentara en una mesa a políticos de todos los signos. El rey Felipe, por ahora, sigue esa línea, acertada, de no meterse en política pero buscar la conciliación y defender nuestros intereses en el extranjero. Pero no hay que perder de vista que, aunque estemos en una monarquía parlamentaria, nosotros decidimos; si un día la monarquía no sirve a los intereses de España, nosotros decidiremos. Estoy abierto a ese debate, pero ahora Felipe VI no es el problema.

--¿El aborto debe seguir siendo un derecho de la mujer, como establece la ley en vigor desde el 2010?

--Jurídicamente no está claro que sea un derecho, pero apoyo este modelo de plazos nítidos. Sobre la reforma del PP, pensamos que las menores que quieran interrumpir su embarazo deben comunicárselo a sus padres, no obtener su consentimiento.

--¿Un gobierno de C's mantendría los acuerdos con la Santa Sede?

--España debe seguir siendo aconfesional y respetuosa con la libertad religiosa. Iglesia, partidos, patronales y sindicatos deberíamos pagar el IBI como todo ciudadano. Los restantes acuerdos son revisables.