La presidenta de la Junta y candidata a la reelección por el PSOE, Susana Díaz, defendió su modelo de gestión de los servicios públicos, mientras los aspirantes de PP, Adelante Andalucía y Ciudadanos le han afeado la «escasa inversión» en sanidad, educación y servicios sociales. Díaz definió los servicios públicos como «una garantía para disfrutar en igualdad» y un «instrumento que hace de colchón social cuando hay dificultades». «No todos los gobiernos nos enfrentamos igual a una crisis que ha sido dura», ha dicho la candidata socialista, que ha repasado datos como que desea que haya 12.000 docentes más en la próxima legislatura o la «revolución» que ha supuesto la bonificación de las matrículas universitarias. En respuesta a Moreno (PP) sobre el sistema sanitario le ha espetado que «afortunadamente» ambos tienen dos modelos diferentes y el suyo es «que no se privatice la sanidad». Por su parte Moreno ha presumido de que su modelo es «crecer en gestión, en eficacia y en que las cosas funcionen», además de acusar a Díaz de ser responsable de una gestión que «está atrofiada», «Vamos a dar la palabra a los profesionales que son los que saben porque están a pie de tajo», remachó el líder del PP andaluz,

Teresa Rodríguez, ha lamentado que desde 2010 no se hayan recuperado los niveles de inversión en los servicios públicos, que «funcionan ahora peor que hace cinco años», lo que supone, ha dicho, «un drama para los andaluces».

Desde Ciudadanos Juan Marín acusó a Susana Díaz de no querer oír una realidad que es aplastante» en la que sanidad y educación «se han convertido en tercer y cuatro problema de los andaluces», con datos como «menos número de camas por habitante» o «tener que esperar días para que te atiendan en una farmacia por la subasta de medicamentos».