Uno de los efectos que está teniendo la crisis es el de trabajar más por menos: los empleados cada vez hacen más horas extraordinarias que las empresas no retribuyen. Así lo indican los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA): en el 2012 el porcentaje de horas extra no pagadas alcanzó el 54,5% del total, según informó ayer la Cadena Ser . Esta práctica produce ahorros multimillonarios a las compañías: el año pasado, más de 2.200 millones de euros que tendrían que haber ido a los empleados por trabajar de más se quedaron en las arcas de las compañías.

Los datos salen de cruzar las cifras de la EPA sobre horas extra no pagadas con el coste de la hora extraordinaria que marca otra encuesta del Instituto Nacional de Estadística (INE): la Encuesta Trimestral de Coste Laboral (ECTL). Esta última muestra que el coste medio de la hora extra en 2012 fue de 15,83 euros. Si se multiplica esa cantidad por el total de horas extra trabajadas pero no pagadas durante 2012 sale la cifra total que se ahorraron las empresas: 2.228 millones de euros.

PEOR CON LA CRISIS Los datos del INE no sólo muestran cómo las compañías dejan de pagar importantes sumas de dinero a sus trabajadores, sino que además señalan que la práctica de no pagar las horas extra va en aumento con la crisis. En el 2008, el porcentaje de horas extra no pagadas fue del 38,21%. La proporción va desde entonces en aumento año tras año hasta superar el 50% en el ejercicio que acaba de terminar: en el 2012, el 54,5% de las horas extra que se hicieron no se abonaron.