La diferencia entre lo que vale y lo que cuesta. Es una eterna dicotomía, en el fútbol también, y de ahí que no siempre la inversión realizada por los clubs, sea en una plantilla o en un futbolista en concreto, se vea reflejada luego en el césped. El verde es el que pone siempre a cada uno en su sitio, el balón es el que dicta sentencia al final y señalará los cuatro equipos que tendrán derecho a competir la próxima temporada, la 21-22, en Segunda División A. Pero existe desde hace años un referente en lo que a coste de plantillas y jugadores se refiere: el sitio web Transfermarkt. Y ahí, el Córdoba CF, si no como máximo candidato, sí que está entre los favoritos a pelear el ascenso.
A pesar del aumento de equipos en la Segunda B esta temporada, de 80 a 102, lo cierto es que el número de filiales casi no ha variado. La pasada campaña fueron 20 y en esta serán 21, pero es innegable la distorsión que provocan las canteras de los equipos de Primera y Segunda División, sobre todo de los equipos grandes, porque sin ir más lejos, la plantilla de mayor valoración del fútbol de bronce español es la del segundo equipo del FC Barcelona, con 28,10 millones de euros, nada menos. Para ponerlo en perspectiva, el valor del segundo equipo culé es mayor que el de 17 equipos de Segunda División A. Por lo tanto, habría que eliminar de la ecuación a dichos filiales, aunque ciertamente compiten, entrarán en playoff varios de ellos -ya lo hicieron la pasada campaña- y serán algunos serios candidatos al ascenso de categoría.
Entre el resto de equipos solo ocho tienen mayor valoración que la del Córdoba CF, situada por Transfermarkt en 4,85 millones de euros. A la cabeza se sitúa claramente el Deportivo de la Coruña, con 12,50 millones de euros, muy destacado, y con hombres con muchos partidos no ya en Segunda, sino en Primera División: Borges, Miku, Álex Bergantiños, Granero, etcétera. Si por valoración de plantilla hay que medir, los gallegos serían los claros candidatos al ascenso. A muchísima distancia de los coruñeses y un escalón algo por encima del resto del grupo de cabeza se sitúa, precisamente, un equipo del Grupo IV, aunque del Subgrupo A, el Marbella, con 6,35 millones, es decir, un millón y medio más que los blanquiverdes. Y, a partir de los marbellíes, las diferencias son escasas: el Salamanca UDS, con 5,45; el Extremadura, con 5,30 millones; el Numancia, con 5,25; el Andorra de Piqué, con 4,95 millones; el Badajoz, con 4,90, los mismos que el Talavera y, tras ellos, el Córdoba CF, con los mencionados 4,85 millones. Son, exceptuando las plantillas de los filiales, los nueve planteles más valorados en el inicio de la competición liguera. Y hay que recordar que si a los playoff llegan los 16 mejores, al partido final por el ascenso llegarán los ocho más fuertes. Por lo tanto, los blanquiverdes tienen fundadas razones para pelear y llegar a ese encuentro final convertido en puerta a la Segunda División A y, a partir de ahí, el fútbol decidirá.
Un detalle más: el descenso de la edad media de la plantilla blanquiverde también es notorio. Si la pasada campaña era la segunda plantilla más veterana de la categoría, en esta temporada, con 22 equipos más, no está entre las diez más mayores. Incluso sus 27,7 años de media son repetidos por no pocos equipos. La plantilla más experta, hoy por hoy, es la del Pontevedra, con 30 años exactos de media, seguida por la del Coruxo, con 28,8 años y la del Tamaraceite, con 28,6 años. Otro cantar serían los once titulares, por lo que habrá que prestar atención a los hombres en los que deposita su confianza Juan Sabas para el armazón del equipo. Por valor de plantilla, el Córdoba CF debe estar en el arreón final y lo hace con una plantilla más joven que la de la temporada pasada. Pero como siempre pasa, será el propio fútbol el que ponga a todos en su sitio.
