El entrenador del FC Barcelona, Pep Guardiola, admitió que "no" es "muy partidario de que se silbe" el himno de España en los prolegómenos de la final de Copa del Rey que les mide al Athletic Club en el Vicente Calderón.

"No soy muy partidario de que se silbe, pero me sabe mal que la señora presidenta de la Comunida de Madrid no venga a ver el partido. Nos habría honrado su presencia, pero claro que puedo respetar su ausencia", indicó Guardiola en la rueda de prensa previa al choque.

Además, el técnico de Santpedor recordó que "las reivindicaciones se hacen en los parlamentos". "Se trata de reinvindicar el fútbol de cada uno. La gente del Barça demostrará lo contenta que es demostrando su lugar de procedencia", añadió el entrenador culé. Por último, el míster del FC Barcelona recordó la final de 2009, que también enfrentó a estos dos equipos. "Ya dejaron claro que son grandes aficiones y que queremos disfrutar del fútbol, del espectáculo", añadió Guardiola, que dirigirá su último partido como técnico blaugrana.

LA ILUSION DE BIELSA Por su lado, el técnico del Athletic Club, Marcelo Bielsa, mostró ayer su ilusión y la de todo el pueblo vasco de disputar la final, y confesó que "partidos como este" son parte del "sueño al que pertenece el fútbol" con lo que se considera un privilegiado por poder vivir "esta fiesta". "Cuando uno llega al fútbol lo hace como un profesional, pero el sueño al que pertenece el fútbol es poder participar en partidos como este. Poder se un invitado de esta fiesta es muy lindo", señaló el técnico del conjunto vasco en la rueda de prensa celebrada en el estadio del Manzanares un día antes de la gran final española. "La ilusión es máxima, describir el sentimiento que tiene un pueblo, eso genera ilusión".