El Sevilla FC se quedó a un paso de cumplir su objetivo de acabar como primero del Grupo G, tras perder (1-0) en el estadio Ghencea, de Bucarest, ante el Unirea Urcizeni, en la penúltima jornada de clasificación del Grupo G de la Liga de Campeones. Le faltó al equipo español su capacidad goleadora, pese a disponer de diversas y claras ocasiones, ante un rival muy compacto y aguerrido que se jugaba muchas de sus posibilidades de estar en la siguiente fase de la Liga de Campeones y que, además, se vio favorecido por un autogol de Ivica Dragutinovic.

Fue el Unirea el que dio el primer aviso, al minuto de juego, en un barullo en el área sevillista que culminó Brandan, pero la jugada -con balón a las redes sevillistas- fue invalidada al parecer por fuera de juego. A partir de ahí el Sevilla comenzó a controlar el partido en todas sus fases. Pese al control de los sevillistas, ya en el ocaso del primer tiempo Ivica Dragutinovic, en una jugada desgraciada, ya que los adversarios estaban un poco alejados, al tratar de despejar el balón tras una falta, batió a su compañero Javi Varas. en el segundo tiempo el juego fue más trabado, con un Sevilla dominador y un Unirea que mantuvo su intensidad en el juego.