El escritor y teólogo Antonio Medina ofrece en su libro Cervantes y el Islam las claves para descifrar su tesis de que El Quijote es la mejor introducción al Corán y al Islam que se haya escrito en castellano. "Hay muchísimos dichos coránicos e incluso pequeños textos del Corán que se encuentran claramente en la novela cervantina. Yo tengo la tesis de que al igual que El Código da Vinci revela las claves del cristianismo, mi ensayo descifra las claves para una lectura más profunda de El Quijote ", afirma Medina.

Cervantes y el Islam , publicado hace algo más un mes por la editorial barcelonesa Carena, es un resumen de la tesis doctoral que ha realizado a lo largo de veinte años de investigaciones su autor.

En los primeros capítulos, Antonio Medina contextualiza tanto la biografía de Miguel de Cervantes como su obra y establece los numerosos vínculos que unían al escritor del siglo XVII con los musulmanes.

También establece Antonio Medina una completa genealogía de la familia cordobesa de Cervantes a través de la documentación existente sobre ella en el Archivo de Protocolos de Córdoba y en la Biblioteca municipal de la ciudad. "El nacimiento de Miguel de Cervantes tuvo lugar en la ciudad de Córdoba y no en Alcalá de Henares, aunque sin ser destetado su familia tuvo que huir a Valladolid por un pleito en relación a su limpieza de sangre", sostiene este experto.

Según Antonio Medina, Miguel de Cervantes era "sucio de sangre", puesto que provenía de tres ramas de moriscos y de una de judíos. Era un "converso", que pasó su infancia en el barrio de la Axerquía y pudo estudiar en Córdoba con los jesuitas, gracias a su inteligencia, ya que los "sucios de sangre" tenían vedada la educación.

El ser converso fue el motivo --según Antonio Medina--, que le impidió realizar estudios universitarios y también el poder embarcarse para las Américas, sin olvidar múltiples pleitos y huidas de la justicia. "Los Cervantes de Córdoba como todos los de Andalucía eran sucios de sangre, puesto que el apellido era un préstamo de un padrino para convertir al cristianismo. También toma prestado su segundo apellido, Saavedra", comenta Antonio Medina.

Según este ensayo, cuando Miguel de Cervantes es capturado en Argel se reconoce musulmán y adopta el nombre de Ahmed Benengeli (hijo del Evangelio), diciendo luego el escritor que es ese Ahmed el auténtico autor de El Quijote . "Escoger ese nombre como musulmán es genial, puesto que con él realiza una apuesta total por el mestizaje y la convivencia y recoge la tradición de los musulmanes andalusies", opina este filósofo.

Para Medina, Cervantes regresa a España para poder cumplir su proyecto de vida como literato, ya que en árabe no podía desarrollar su genio en las letras.

A lo largo de 500 páginas, Medina realiza un análisis filosófico y antropológico de Cervantes y de su pensamiento en El Quijote .