El internacional cordobés Felipe Reyes, capitán del Real Madrid, ha declinado recoger hoy la medalla de plata de la ciudad con la que el Ayuntamiento de Córdoba ha decidido distinguirle, junto a otras personas ilustres.

Fuentes cercanas al jugador han explicado que Reyes se siente «molesto» por el hecho de que el Ayuntamiento le haya relegado a una distinción de menor importancia, sobre todo cuando ya cuenta con el Príncipe de Asturias de los Deportes, la Medalla de Oro de Andalucía o la de la Comunidad Autónoma de Madrid. El ala-pívot, que es el deportista más laureado de Córdoba, no ha entendido por qué en su ciudad se le «relega a no ser distinguido ni siquiera con una de las siete medallas de oro concedidas este año», han precisado las fuentes.

De hecho, el jugador fue propuesto por distintos grupos políticos para recibir el título de hijo predilecto, que ha recaído en el juez José Castro, si bien el equipo de gobierno consensuó esta distinción al togado y la decisión fue ratificada por unanimidad en el Pleno. Finalmente, se decidió equiparar el reconocimiento a Reyes al recibido el año pasado por la gimnasta Lourdes Mohedano. Además de la distinción a José Castro, se concederá el título de hijos adoptivos al exalcalde Andrés Ocaña, fallecido este año, y a Fray Carlos Romero, fundador de las Hermandades del Trabajo. En cuanto a las medallas, una será de honor para la profesora de Derecho Eclesiástico del Estado Amelia Sanchís y se concederá medalla de oro a la bailaora Blanca del Rey; a la catedrática de la Universidad de Córdoba Carmen Galán; al médico cardiólogo José Suárez de Lezo y a la emisora Cope Córdoba. Por último, junto a Felipe Reyes también se ha distinguido con medalla de plata a Magdalena Díaz, referente del movimiento asociativo.