El Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad de Andalucía (Cermi Andalucía) ha pedido a la Junta de Andalucía y al Ayuntamiento de Constantina (Sevilla) que suspendan el espectáculo cómico taurino en el que participan personas con acondroplasia y que está previsto para este domingo en la localidad por «atentar contra la dignidad de las personas con esta discapacidad».

El movimiento andaluz de la discapacidad ha mostrado así su rechazo a la autorización concedida por la Consejería de Presidencia, Administración Pública e Interior, a través de la Delegación del Gobierno de la Junta en Sevilla, y el propio Consistorio para el desarrollo de este espectáculo, después de la reciente cancelación del que iba a celebrarse en la localidad granadina de Baza, según informa en una nota de prensa.

Cermi Andalucía ha apoyado la postura defendida por la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de instar a los ayuntamientos a suspender este tipo de eventos cómicos con el objetivo de «garantizar la dignidad y la imagen de las personas de talla baja», sosteniendo que estos eventos «vulneran el cumplimiento de muchos preceptos y artículos de las normativas autonómica, nacional e internacional sobre discapacidad y derechos humanos».

La presidenta de Cermi Andalucía, Marta Castillo, ha reclamado la suspensión inmediata de todos estos espectáculos por resultar «denigrantes, burlescos y fomentar la mofa, ya que lo único que consiguen es distorsionar ante la sociedad la imagen de las personas con discapacidad, persistiendo en los estereotipos negativos y la representación degradante de dichas personas». Por su parte, la dirección del espectáculo cómico taurino Diversiones en el ruedo y sus enanitos toreros ha emprendido acciones legales contra el director general de Personas con Discapacidad e Inclusión de la Junta, Marcial Gómez, por la que considera «arbitraria e injustificada» actuación contra su trabajo.

A través de un comunicado, publicado en su perfil en Facebook, esta empresa sostiene que el responsable autonómico habría presionado y coaccionado al Ayuntamiento de Baza (Granada) para impedir que se llevara a cabo el espectáculo contratado para el pasado 15 de agosto.