La Plataforma Por un Aire Limpio, surgida en Montilla el mes pasado ante las molestias que generan las emisiones de la orujera de El Tejar, ha previsto celebrar el próximo 1 de octubre una marcha hasta las instalaciones de la empresa, ubicada entre los términos municipales deEspejo y Montilla, con el objetivo de exigir a la Junta de Andalucía una «revisión» del informe técnico que autorizó la actividad de la planta.
Con esta marcha, la primera de las movilizaciones planteadas por la plataforma, se pretende «visibilizar el malestar vecinal» de las localidades del entorno que, según los portavoces de la entidad, «viven día tras día con una niebla densa de color oscuro y con un olor desagradable».
«Existe una gran preocupación sobre los efectos que estos humos pueden ocasionar en la salud de los ciudadanos, pero también en la economía de una comarca eminentemente agroindustrial, y con un gran peso del turismo», sostienen los integrantes de la plataforma que, a su vez, están analizando posibles soluciones técnicas.
Uno de los ejemplos más recientes se registró en el municipio jiennense de Martos, donde se apostó por el uso de electrofiltros húmedos, una tecnología puntera que permite compatibilizar la actividad de esta industria y el respeto por el medio ambiente.
«Uno de los problemas más difundidos, y a los que es más sensible la actividad industrial moderna, es la polución atmosférica», reconoce Vicenzo Bellini, ingeniero de Bellinieng, empresa referente en el uso de electrofiltros húmedos que ha actuado en orujeras de Martos y Mérida.
Según este ingeniero italiano, la eficacia de depuración de este sistema «es del 99,99 por ciento para partículas de 0,01 micras», lo que garantizaría «emisiones a opacidad cero».
«Su instalación es sencilla, mediante la construcción modular del electrofiltro, y no suele demorarse más de tres semanas, plazo al que se le suman dos semanas para acometer las conexiones hidráulicas y eléctricas», precisó.