Prada

La escritura total de Juan Manuel de Prada es una construcción catedralicia, una concepción del volumen verbal tras el retablo de sus personajes. El lunes estará en la Feria del Libro de Córdoba, presentando su novela Morir bajo tu cielo . Hay en la tensión de la acción narrativa una mirada cinematográfica, una especie de dirección literaria de autor crepuscular que administra la profundidad de campo y los primeros planos de los protagonistas, esa fisonomía del temblor detrás de un parpadeo. Según Pere Gimferrer, Morir bajo tu cielo gravita entre John Ford y Joseph Conrad. En efecto: ambientada entre 1898 y 1899, narra la resistencia de los últimos soldados de Filipinas, cuando España ya ha capitulado y la guarnición de Baler, todavía tras los muros de la iglesia, se niega a entregar las armas, porque no se cree la rendición. Cada protagonista es una inmensidad, como también la selva se agiganta, salvaje en la espesura, en ese Corazón de las tinieblas , como otro personaje: así, en su acecho latente, la oscuridad anega la esperanza de los personajes, la aventura dramática y la peripecia histórica de España. Estamos ante un folletín colosal, ideológico y social sobre la piel curtida, pero también abierta, de nuestra identidad. Novela o novelón de época que podemos recorrer, en su galería de escenarios vivos, con abismo y dolor. A través de una prosa de potencia poética labrada, en un paralelismo entre la corrupción política de la Restauración y la actual, Morir bajo tu cielo nos muestra a un autor íntegro, con mundo y moral propia, que le ha quitado sus máscaras a la realidad.