Impulsar el tejido comercial de Montilla y potenciar la actividad económica en torno a este sector. Ese es el objetivo del plan integral en el que trabaja desde hace varios meses el Ayuntamiento y que el pasado mes de mayo se concretó en nuevas actuaciones que tienen la Corredera como eje vertebrador. De esta forma, el concejal de Promoción Económica, Manuel Carmona, defendió el interés del equipo de gobierno por que «la iniciativa emprendedora pueda sentirse apoyada y respaldada en su apuesta por generar desarrollo económico y empleo», lo que, en opinión del edil, pasa por «generar infraestructuras urbanísticas vinculadas al desarrollo de la economía local» y por «poner en valor el patrimonio histórico y cultural» del municipio.

Para el responsable de Promoción Económica, la reurbanización de la Plazuela de la Inmaculada, cuyo inicio se prevé para finales de julio, representa un «paso importante» hacia ese «modelo de centro histórico» que «abrirá importantes oportunidades de actuación» en la vía.

De este modo, como «medidas transitorias», la calle Corredera tiene ahora carácter semipeatonal en tramo único, permaneciendo abierta al tránsito del transporte público y de emergencias y a vehículos de residentes para el acceso a sus cocheras. De igual modo, el Consistorio montillano ha fijado un horario de carga y descarga, con habilitación de varias zonas.