El recinto ferial de Montilla acogió el pasado fin de semana Diverfauna, un evento que pretende fomentar el respeto por el mundo animal, además de incidir sobre el importante papel que cada especie desempeña en el planeta.

Los amantes de los animales tenían una cita obligada en Montilla. Y es que hasta allí se desplazó Diverfauna, la segunda feria más importante de España en su sector.

El evento, que contó con la colaboración de la asociación montillana Dejan Huella, convirtió el recinto ferial de la localidad en un enorme zoológico en el que los más pequeños pudieron contemplar más de 80 especies e interactuar con algunas de ellas.

"Nuestro objetivo es inculcar a todos los visitantes, pero especialmente a los niños, que un animal no es un juguete, sino que implica una responsabilidad", explicó el director de Mercafauna, José María Avila, quien se mostró satisfecho por la respuesta del público a esta iniciativa que tiene su origen en la localidad sevillana de Casariche.

Además de la asociación Dejan Huella, Diverfauna contó con la participación y la presencia de colectivos como Acógenos de Cabra; Wally y Tras la Huella, de Córdoba; o Segunda Oportunidad, de Santaella. A lo largo de la jornada del domingo se registró la visita de varios colectivos de discapacitados visuales que pudieron apreciar, mediante el tacto, las peculiaridades de la piel de una serpiente o el suave plumaje de un búho.