El jefe de los observadores de la ONU en Siria, el general Robert Mood, viajaba en el convoy que fue alcanzado este miércoles por una explosión en la provincia de Deraa, en el sur, pero ninguno de los integrantes de la misión resultó herido, según informó el propio Mood en rueda de prensa.

La explosión ha causado heridas a ocho soldados sirios, según ha informado Ahmad Fawzi, portavoz del enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan.

"No se ha producido ninguna baja entre los observadores, pero varios soldados sirios han resultado heridos y han tenido que ser trasladados al hospital", ha explicado Fawzi en rueda de prensa en Ginebra.

Unos 80 observadores se encuentran en Siria para certificar que las fuerzas leales al presidente, Bashar al Assad, y los opositores cumplen el alto el fuego incluido en el plan de Annan para poner en marcha las negociaciones que permitan una salida política al conflicto.

Según Fawzi, el jefe de los observadores, el general noruego Robert Mood, ha explicado a los reporteros que le acompañan en su convoy que este es un ejemplo de que la población siria está sufriendo diariamente. "Todo tipo de violencia debe detenerse", ha señalado el portavoz.

Alrededor de 9.000 personas han muerto, según Naciones Unidas, desde que en marzo de 2011 comenzarán las manifestaciones que fueron reprimidas por las fuerzas de seguridad sirias. El Gobierno de Damasco ha asegurado que combate contra terroristas.

El general Mood ha visitado a los heridos en el hospital y podría elaborar un informe. Asimismo, según Addunia TV, el militar declaró posteriormente durante una rueda de prensa en Deraa que la explosión es un ejemplo de lo que sucede en Siria.