El argentino Leo Messi volvió a ser el faro del FC Barcelona y, con dos goles, rearmó a su equipo para vencer a domicilio al Deportivo Alavés, que tuvo a su mejor hombre en la portería, donde Fernando Pacheco desbarató numerosas ocasiones culés e incluso detuvo un penalti al astro blaugrana. Dos apariciones del rosarino fueron suficientes para que el Barça se llevara los tres puntos en un choque que dominó de principio a fin, aunque no pudo abrir la cuenta goleadora hasta la segunda parte, y en el que el plantel vitoriano no pudo fructificar las pocas ocasiones que tuvo. El choque tuvo la anécdota del debut de una de los últimos fichajes de los catalanes, el brasileño Paulinho, que entró a la cancha en el minuto 88 en lugar de Andrés Iniesta, titular tras superar una lesión.

La mejor ocasión del Alavés tuvo lugar en el minuto 30 cuando, tras una recuperación de balón, Manu García puso un balón en largo a Rubén Sobrino que ganó en velocidad a Piqué y se plantó delante de Ter Stegen, quien, con una media salida, despejó desde el suelo el remate del delantero local. En el minuto 37, el colegiado no dudó en señalar penalti al interpretar que el brasileño Rodrigo Ely agarró dentro del área a un rival, después de botar un falta el equipo visitante. Pacheco volvió ser protagonista al adivinar el lanzamiento de Leo Messi desde los once metros y enviar a saque de esquina el disparo del futbolista argentino.

Ya en la segunda parte, la defensa vasca cedió. Messi en dos ocasiones marcó para llevarse los tres puntos a la capital catalana. El argentino se encargó de abrir el marcador en el minuto 55, cuando recogió un balón suelto dentro del área, se anticipó a Tomás Pina e introdujo el esférico en la portería local. En el minuto 66 llegó el segundo del Barcelona, de nuevo obra de Leo Messi, quien aprovechó un mal despegue de Alexis para fusilar a Pacheco y sentenciar el partido.