Ayer volvió a El Arcángel Aritz López Garai, que viene cedido por el Sporting hasta final de temporada. Nada más llegar a Córdoba, el vasco fue al estadio para formalizar su contrato con la entidad blanquiverde. Por la mañana, el máximo mandatario de la sociedad anónima deportiva, Carlos González, revelaba en la radio del club que fue el propio centrocampista el que se puso en contacto con el presidente el sábado tras la derrota en Sabadell para ponerse a su entera disposición, si así lo entendía el cuerpo técnico.

López Garai, a sus 33 años, recala de nuevo en el Córdoba después de un año muy irregular en el conjunto asturiano. Pese a ser titular al principio de temporada en el equipo de Sandoval, discrepancias con el entrenador y parte del vestuario le llegaron a sacar, incluso, de las convocatorias del técnico del Sporting, que hasta llegó a pedir un recambio en el mercado de invierno para el vizcaíno, según reveló la prensa gijonesa. Desde la jornada 14 no compite.

El futbolista llega apercibido y no podrá jugar la próxima jornada, precisamente ante el Sporting, pero está disponible para recibir este sábado al Murcia. Hoy participará en su primer entrenamiento a las órdenes de Albert Ferrer y a las 13.15 será presentado en la tienda del club.

CONDICIONANTE La llegada de López Garai para suplir la baja de Carlos Caballero, condiciona la participación de los jugadores del filial con más de 23 años, que si bien antes podían subir al primer equipo para ya no volver al B, con el vizcaíno se vuelve a llenar el cupo de fichas profesionales. Es especialmente importante en el caso de la portería, ya que con la lesión de Mikel Saizar para prácticamente lo que resta de temporada, el guardameta que lo reemplazará será Juan Carlos -seguramente con Sillero de segundo- y no Razak, el meta del segundo equipo, más acostumbrado a la competición que el ex del Hércules. En el lado opuesto, Obiora podría pasar a ayudar al Córdoba B.