La escritora Inma Chacón se encontró ayer en la Feria del Libro con sus lectores cordobeses, ávidos de conocer detalles de su última novela, Tiempo de arena , con la que la autora extremeña se alzó como finalista del premio Planeta el pasado año. El papel de la mujer en las dos primeras décadas del siglo XX, la masonería femenina, el movimiento sufragista y la llegada a la Universidad del sexo femenino son algunas de las claves del libro, que también ahonda en la sociedad de la época y en lo se esperaba de la mujer en aquellos años, temas que Chacón abordó durante el encuentro, que consideró "muy gratificante". A partir de la desaparición de dos niños, cuyo nacimiento se oculta porque la madre no estaba casada, la autora teje una trama de misterio con tres hermanas como protagonistas que se enfrentan a la sociedad que les toca vivir de maneras muy diferentes. De uno de estos personajes se vale la autora para narrar cómo fue la llegada al mundo universitario de las mujeres, "a las que recibieron a pedradas", según señaló la autora, que también resaltó que el hecho de poder estudiar "no significaba que pudieran trabajar".

La implicación de la mujer en la masonería, "un tema que apenas se ha tratado literariamente hablando", también despertó la curiosidad de los lectores, pero donde hizo más hincapié la escritora es el "homenaje" que ha querido rendir con esta obra a todas aquellas mujeres que han perdido a sus hijos por causas sociales, como la de su novela; políticas, como las mujeres republicanas encarceladas a las que quitaban a sus vástagos "para ser educados de otra forma"; o económicas, como se ha descubierto recientemente con el caso de los niños robados.

Chacón considera que la mujer todavía "sigue siendo ciudadano de segunda" en algunos aspectos porque "tenemos los mismos derechos que los hombres desde el punto de vista legal, pero en la práctica las posibilidades de la mujer frente al hombre son mucho menores, hay un techo de cristal que no se consigue romper".

Además de Inma Chacón, el Bulevar también recibió al escritor Pablo Aranda, que participó por la mañana en los encuentros con escolares, y a Fernando Alberca, que firmó ejemplares de su libro Todos los niños pueden ser Einstein . Por su parte, Juan José Primo Jurado, subdelegado del Gobierno, atendió a los lectores de su libro Iglesias de Córdoba , fruto de un exhaustivo trabajo del autor, que realiza un detallado registro y estudio de todas las iglesias cordobesas, cerca del centenar y medio entre las existentes y las desaparecidas. Por otro lado, Arnau Taberner presentó El investigador sigiloso o la vida a noventa grados , novela en la que el autor se inspira en los entresijos del mundo empresarial de antes y durante la burbuja inmobiliaria. Por último, Gemma Vega y Elena Mellado dieron a conocer Los conejos no llevan reloj , galardonado con el premio Esculpiendo Historias 2011.