Dos familias cordobesas van a presentar recurso de alzada en la Consejería de Educación contra la decisión de la Junta de Andalucía de archivar la petición para que sus hijas, que presentan necesidades educativas especiales, puedan permanecer "de forma extraordinaria" un curso más en las escuelas infantiles donde cada una de ellas están matriculadas, "con el objetivo de que sigan avanzando en aspectos como el motor y madurativo y estén más preparadas para entrar en el colegio, pero ya cuando tengan 4 años". Nuria Tejero, madre de una niña que padece síndrome de incotinencia pigmentaria, y Bernardo Jordano, padre de una menor con una rara alteración del cromosoma 3 que implica retraso madurativo, hipotonía, entre otros déficits, denuncian que "en anteriores cursos la Consejería de Educación ha permitido a otras familias que sus hijos permanezcan un curso más en la guardería antes de entrar en el colegio, por eso no entendemos la negativa a nuestra petición. Y para ello, sólo hizo falta un informe del equipo provincial de atención temprana, que en nuestros casos es favorable a que nuestras pequeñas sigan un año más en la guardería".
La respuesta que han recibido estas familias de la Consejería de Educación, tres meses después de presentar la demanda, ha sido que "se archiva la documentación que hemos aportado para justificar nuestra solicitud, dado que la orden de 29 de diciembre del 2008 (que establece la ordenación de la educación Infantil en Andalucía) recoge que la permanencia extraordinaria de alumnos con necesidades educativas especiales sólo se podrá autorizar en el segundo ciclo de Educación Infantil", cuando los niños tienen 5 años y están en el último año de Infantil. Pero realmente "no existe normativa que regule solicitudes como las nuestras. Nos dicen que está pendiente de reglamentarse, que primero dirán que no, que recurramos y que luego seguramente se aceptará como ha pasado otros años", indican estas dos familias, "pero con la angustia hasta saber si lo lograremos y la obligación de presentar recurso de alzada o incluso llegar a un contencioso". Nuria Tejero explica que su hija fue gran prematura y nació un 31 de diciembre, del año 2012, "por 3 horas no fue en el 2013, lo que en su caso la habría beneficiado y a lo mejor no hubiera hecho falta pedir que pase un año más en la guardería". Por su parte, Bernardo Jordano expone que su hija está pendiente "de una operación de las dos caderas muy importante". Estas dos familias además aseguran que "la propia Junta ya se comprometió el curso pasado a regular de forma expresa esta medida en el mismo sentido que nosotros le proponemos, ya que era consciente de que este año se encontraría con más familias en igual situación".
