Los colectivos encerrados en el colegio público Rey Heredia --situado junto a la Torre de la Calahorra y cerrado hace tiempo a la actividad docente-- han recibido el aviso de que el lunes se corta el suministro eléctrico y son conscientes de que "esto es el principio de una larga batalla que nos queda por librar", según declaró a este periódico Rafael Juan, portavoz de la denominada Acampada por la Dignidad. Los encerrados ya tiene preparado un generador de corriente.

Ayer se cumplió una semana de esta reivindicación que llevan a cabo 19 colectivos que fueron desalojados de la Casa Ciudadana de la antigua Escuela de Magisterio y que cuentan con el apoyo del Consejo de Distrito Sur.

Aunque el gobierno local del PP dio un ultimátum para que abandonaran el colegio, "nosotros seguimos con las actividades programadas", entre las que se encuentran talleres, charlas, la puesta en funcionamiento de un huerto para el próximo fin de semana y un comedor social. Esta última iniciativa "esperamos ponerla en marcha el martes", señala Juan, quien añade que "la cantidad de familias sin ingresos es muy grande" en esa zona de la capital cordobesa.

También piensan ofrecer "clases de apoyo por la tarde para los niños" y reitera que "esto no puede estar cerrado para que se tire" mientras que asociaciones y colectivos no tienen un lugar para reunirse. El portavoz anunció que la semana que entra "iremos por el barrio para explicar a los vecinos lo que estamos haciendo" y destacó las muestras de solidaridad que están recibiendo.

Como ayer adelantó este diario, el alcalde, José Antonio Nieto, negó que se vaya a emplear la fuerza para desalojar a los ocupantes y expresó su confianza en que los acampados se marchen antes de que la vía judicial decrete el lanzamiento.

TRANQUILOS Juan apuntó que "no nos ha inquietado el exhorto del Ayuntamiento" y que en caso de que fueran obligados a abandonar las instalaciones "volveremos a ocupar este colegio u otro; hay un montón de edificios como este en Córdoba", si bien esperan que "impere la cordura y no nos desalojen".

Sobre el tira y afloja de la Junta y el Ayuntamiento por la titularidad del colegio, el portavoz señaló que "esa guerra no es la nuestra; la nuestra es contra los recortes y la privatización de servicios públicos".

Por último recordó que "nuestra idea original era una acampada" pero la situación ha derivado en un encierro. Las circunstancias en contra "no nos hacen dudar de nuestro objetivo", apostilló.