El plan de mejora de la accesibilidad que el gobierno local ha finalizado recientemente en la Fuensanta ha recibido duras críticas por parte de la Asociación de personas con discapacidad y del grupo municipal del PP. Ambos denuncian «la chapuza» que se ha cometido en esta barriada, donde se han dejado varios puntos negros, como bordillos inaccesibles para las personas que van en sillas de ruedas o los carritos de bebé. «Para hacer esto casi mejor que no se hubiera hecho nada», sostienen Javier García y Juan Romero, de la asociación de personas con discapacidad, que lamentan que algunos políticos no se tomen el tema de la accesibilidad «en serio y que solo hagan cosas por postureo».

En concreto, denuncian que «lo más sustantivo para la accesibilidad, que es rebajar las aceras y ponerlas a cota cero, no se ha hecho» en algunas zonas, lo que obliga a las personas con la movilidad reducida a tener que circular por la calzada. Javier García añadió que «si esto es una actuación para mejorar la accesibilidad que venga dios y los vea» y que «se ha hecho una actuación absolutamente vergonzosa». En este sentido, afirmó que «las personas con discapacidad no nos merecemos este tipo de actuación».

El portavoz del PP en el Ayuntamiento, José María Belllido, por su parte, exigió a los responsables de la obra que solucionen «de inmediato» los puntos negros y se haga el rebaje necesario en los pasos de cebra. Además, lamentó que el gobierno local tenga «muchos deberes pendientes» en accesibilidad, como son la elaboración de un plan integral; la modificación de la ordenanza de movilidad (que no se cambia desde el año 94), ya que en diciembre finaliza el plazo para adaptarse a la ley, y que se convoque a la comisión de accesibilidad.

Por su parte, el gobierno municipal ha respondido a estas críticas diciendo que los puntos a los que se alude está previsto que se arreglen con el plan de mantenimiento de firme. También recuerdan que el plan de accesibilidad se ha acordado con Fepamic.