Los partidos con representación en el Parlamento andaluz continúan la negociación a una semana de que se celebre el debate de investidura de la socialista Susana Díaz y el "optimismo" del PSOE se contrapone con la posición del PP, Podemos y Ciudadanos, que ayer reafirmaron su rechazo a apoyarle. Después de la reunión que ayer mantuvieron representantes del PSOE y del PP, los socialistas se mostraron "optimistas" porque consideran que los populares son un "partido de gobierno" que es "consciente" de que tiene la "obligación de aportar estabilidad" dentro de la comunidad autónoma, por lo que cree que buscará "canales para el entendimiento" que faciliten la investidura.

"Les hemos trasladado que el PP es un partido de gobierno y tiene que ser responsable y aportar estabilidad dentro de la comunidad autónoma", explicó el número dos del PSOE, Juan Cornejo, que agregó: "Creo que son conscientes de ello y seguirán reflexionando y buscando canales para el entendimiento", al tiempo que señaló que los ciudadanos merecen "políticos resolutivos".

Sin embargo, el presidente del PP andaluz, Juanma Moreno, aseguró que "en este momento" su partido no tiene "argumentos nuevos" para variar su posición y facilitar la investidura de Díaz, ya que entiende que no ha habido ninguna propuesta del PSOE-A que posibilite un "cambio de actitud" de los populares. Eso sí, el líder de los populares explicó que "en política uno se expresa siempre en presente" y que el PP es una "fuerza dialogante" que tiene "la puerta abierta" a seguir hablando, aunque en este momento no hay "posibilidad alguna" de abstenerse en la votación de la socialista, algo que posibilitaría que Díaz fuera investida presidenta de la Junta a partir de la segunda votación.

ENCUENTROS El PSOE y el PP también se reunieron ayer por separado con el nuevo presidente de la Cámara, el cordobés Juan Pablo Durán, encuentro en el que los socialistas han oficializado la propuesta de investidura de Díaz y los populares que no presentarán candidato alternativo. El resto de grupos (Podemos, Ciudadanos e IU) se reunirán hoy con Durán y tampoco presentarán candidato alternativo.

Después del anuncio de la retirada de los expresidentes andaluces José Antonio Griñán y Manuel Chaves, cuyas dimisiones por los ERE ponían Podemos y Ciudadanos como una "línea roja" para negociar la investidura, ambos partidos se apresuraron ayer a asegurar que en este momento su posición continúa sin moverse, sobre todo tras decir Díaz que será presidenta "muy pronto".

La secretaria general de Podemos en Andalucía, Teresa Rodríguez, negó "tajantemente" que su partido haya llegado a "ningún tipo de acuerdo con el PSOE" para facilitar la investidura de Díaz, a la que ha afeaó que "confunda el deseo con la presión". "La presidenta confunde el deseo con la presión. Es una forma de presionar y yo no la veo sana. Trasladar a los ciudadanos que no hay gobierno de la Junta y que hay un bloqueo es reconocer la incompetencia propia", dijo en declaraciones a los periodistas.

Por su parte, Ciudadanos se opondrá a la investidura de Díaz al considerar que la situación no ha cambiado, pues el PSOE no ha exigido a Chaves y Griñán que dejen ya los escaños, ni ha respondido al pacto anticorrupción que le plantearon. Fuentes de esta organización en Andalucía señalan que no hay "ningún motivo" para cambiar de posición porque no ha habido una respuesta a la exigencia planteada por Ciudadanos de la marcha "por escrito" de los expresidentes andaluces.

El coordinador andaluz de IU, Antonio Maíllo, ha calificado de "superficial" el debate abierto sobre la dimisión de los expresidentes y también mantiene su posición de votar en contra de la investidura de Susana Díaz.