Los servicios provinciales de Consumo de la Junta de Andalucía han detectado irregularidades en el 24 por ciento de los 2.616 establecimientos inspeccionados durante 2014 para comprobar el cumplimiento de la normativa básica.

Los controles se han realizado en comercios minoristas que venden productos alimenticios e industriales, incluidos los mercados de abastos, y en establecimientos de prestación de servicios y concesionarios de vehículos para comprobar la información sobre consumo de CO2, según ha informado la Junta en un comunicado.

Durante el desarrollo de la campaña de 2014 los inspectores de Consumo de la Junta han detectado que sigue habiendo establecimientos que carecen de la hoja de quejas y reclamaciones y del cartel anunciador de la misma. Asimismo, los precios de los productos no son expuestos en anaqueles ni en armarios del interior ni exhibidos en los escaparates de los establecimientos inspeccionados.

En el marco de la citada campaña, se han levantado 3.051 actas de las que 736 son positivas porque contienen alguna irregularidad o incumplimiento. Según el desglose de los datos incluidos en la memoria de Consumo, del total de actas 1.041 corresponden a controles básicos realizados en 870 establecimientos, con un resultado de 246 positivas (24 por ciento del total), y 822 se han levantado tras visitar 721 compañías prestadoras de servicios, con un resultado de 163 positivas (casi 20 por ciento).

Asimismo, se han levantado 655 actas en 545 comercios de alimentación, siendo 229 positivas (35 por ciento) y 347 en 305 mercados de abastos con un resultado de 70 actas positivas (20 por ciento).

Además, se han realizado 144 controles en 136 comercios para verificar la información que se facilita sobre consumo de combustible y emisiones de CO2, con un resultado de 21 actas positivas (14,5 por ciento).

CONTROLES 2015

Los controles en este sector se van a seguir realizando durante este año a través del Plan de Inspección de la Junta, que prevé llevar a cabo 2.465 actuaciones entre controles básicos (830), inspecciones en establecimientos prestadores de servicios como locutorios públicos, clínicas estéticas y gimnasios (760), mercados de abastos (530), alimentación (335) y aprovechamientos por turnos de bienes de uso turístico (10).

En las actuaciones se comprobarán la existencia de hojas de reclamaciones, la trazabilidad de los productos para conocer el recorrido desde su origen hasta su venta, los precios en general, la expedición de facturas y los sistemas de peso de las balanzas, entre otros aspectos.

La campaña prevé la realización de un control especial en la provincia de Málaga porque se han detectado incidencias en materia de aprovechamiento por turnos de bienes de uso turístico.

Del mismo modo, el 60 por ciento de las inspecciones se van a centrar en comercios con escaparates en los que se exhiban productos con precios, para comprobar que se indican de forma correcta. Igualmente, el 30 por ciento se van a realizar en comercios situados en barrios o zonas con mayor índice de población inmigrante.

RECOMENDACIONES

La Secretaría General de Consumo recomienda a los consumidores revisar los precios de los productos y servicios, que deberán estar indicados de forma final y completa, incluyendo cualquier tipo de impuesto. Del mismo modo, aconseja solicitar siempre la factura o ticket de compra, puesto que es imprescindible para realizar cualquier reclamación. Asimismo, se recuerda que siempre debe coincidir el precio marcado en la etiqueta con el que se cobra realmente al usuario.

Si el establecimiento donde se realice una compra dispone de balanzas, hay que comprobar si tiene la etiqueta adhesiva de la Junta de Andalucía que verifica su correcto funcionamiento.

Ante cualquier discrepancia, el consumidor puede pedir la hoja de reclamaciones para manifestar su disconformidad y exigir sus derechos. Si en diez días hábiles desde la presentación de la reclamación, la empresa no contesta o su respuesta no es satisfactoria para el usuario, éste puede tramitar la queja a través de las Oficinas Municipales de Información al Consumidor, las asociaciones de consumidores y los Servicios Provinciales de Consumo.