Uno entra en la rueda de prensa de José Luis Oltra y tiene la sensación de que va a pasar algo diferente. Sorprende cómo la maneja, los tiempos, las respuestas, su duración, pero sobre todo sorprende su sinceridad. Cada palabra cuenta y por eso conviene estar atento, porque no dice nada vacío. La comparecencia duró exactamente diez minutos y él ya traía sus tres titulares, independientemente de la primera pregunta, que no contestó, porque ya sabía lo que quería decir. Así que hubiera dado igual la inquietud del periodista. De hecho, entre la primera cuestión y su primera respuesta hubo un silencio de siete segundos. "Lo primero que hay que estar es satisfecho por la victoria porque esto ayuda; luego ser realista y una cosa son los puntos y otra la forma de lograrlo; y lo tercero es que con el campo así todo es más sencillo, así que tengo que darle las gracias a nuestra afición, maravillosa, espectacular, no tengo suficientes adjetivos para calificar su comportamiento; incluso en los momentos delicados ha estado con el equipo".

La segunda pregunta la hizo él mismo. "¿La forma? A mí me gusta ser sincero y objetivo. La primera parte me ha gustado --reconoció--; comete errores puntuales, el gol es evitable, pero el equipo se rehace y le da la vuelta al partido ante un equipo que no había perdido. El inicio de la segunda parte no es malo, pero el gol, que es mérito del rival, nos ha hecho daño y en la segunda parte otra vez hemos dejado al equipo rival que se creciera. Arriba tenemos pegada, somos eficaces, pero tal vez concedemos demasiado, y a mí me hubiera gustado otro tipo de partido. Repito, estoy contento por la victoria, pero soy realista porque no termino de ver lo que creo que podemos dar, aunque seguimos creciendo en números, y no es por suerte ni por casualidad".

Todo eso sacado de una sola pregunta. Oltra había consumido ya tres minutos de rueda de prensa con una sola pregunta. Tres minutos y, realmente, no hacían falta más. Estaba todo dicho. Todo lo demás fue ahondar en el mismo mensaje. "No termino de ver eso que creo que podemos hacer, porque en el tramo final de la primera parte lo hemos hecho; hemos hecho lo difícil, darle la vuelta al resultado, no ponernos nerviosos, y muchas ocasiones del rival no hubo, más emoción y sensación que oportunidades, pero es que nosotros tampoco hemos tenido muchas más", insistió, en otra muestra sincera.

Tampoco se anduvo con rodeos al explicar el cambio de Markovic por Gálvez. "Tenía tarjeta y por su ímpetu no mide bien y no quería quedarme con diez".

El último mensaje que lanzó fue de prudencia, destinado a quienes miran demasiado la clasificación. Oltra les recordó en qué jornada estamos. "Nueve de 42 --repitió en tres ocasiones--; como para sacar pecho o lanzar algún tipo de euforia, te hunden el pecho rápido".