Los vecinos han estado reclamando desde un primer momento que los veladores no impidan la accesibilidad. El manual recoge en este sentido que se han de respetar "las distancias mínimas a fachadas y demás elementos del mobiliario urbano y servicios públicos", propiciando la "accesibilidad a personas con limitación orgánica, funcional o motriz". Además, pide que los establecimientos eviten "molestar a los vecinos", entre otras cosas, con humos y olores, por lo que han de revisar "las cocinas y sus conductos de evacuación" y cambiar los filtros de las campanas extractoras.

El documento avisa también de que "la licencia no permite la realización en la terraza de actuaciones musicales o espectáculos ni la reproducción de música o sonidos amplificados por ningún medio".