Llegar a un acuerdo a la hora de divorciarse no solo es la fórmula más barata sino la más recomendada por los expertos, sobre todo, si existen hijos fruto de la relación. Una idea que parece estar calando en la sociedad española, donde la tendencia es a optar cada vez más por la vía negociada, pero que en Córdoba, donde el 55% de los convenios se firman tras un proceso judicial, se resiste a convertirse en la norma. En la misma línea y según los datos del barómetro jurídico sobre separaciones, divorcios y nulidades matrimoniales presentado ayer por el despacho de abogados Martínez--Echevarría, la crisis está haciendo caer notablemente el número de divorcios en España, si bien en Córdoba han descendido apenas un 10% respecto al año 2006, cuando se produjo el máximo histórico, con 2.246 divorcios, separaciones y nulidades. Es decir, en Córdoba la media de divorcios es mayor a la media española y además se llevan a cabo con mayor litigiosidad.

El director del Departamento de Consumo y Derecho Europeo de la firma y experto en mediación, Agustín Azparren, explicó que Andalucía es la comunidad española con menos divorcios de mutuo acuerdo de España (en torno al 50% del total frente a un 60% de media española) y Córdoba está por debajo de la media andaluza con 45% de procesos consensuados. Los hijos suelen ser el principal motivo de discordia, si bien, según Azparren, "muchos conflictos que supuestamente se plantean por la custodia de los niños esconden otras motivaciones económicas". En este sentido, el barómetro Martínez Echevarría constata que, en la actual situación de crisis, aunque los divorcios han disminuido, se han disparado por cuatro las solicitudes de modificación de medidas. El desempleo o la modificación sustancial de las condiciones de trabajo de los padres ha provocado que muchos reclamen al juez la revisión a la baja de pensiones alimenticias y compensatorias. El acuerdo en este punto tampoco parece ser habitual, ya que de cada diez solicitudes de modificación, solo una es consensuada. La asignación media por pensión alimenticia o compensatoria, que debe ser proporcional a los ingresos del cónyuge obligado a pagar, también ha caído en los últimos años como consecuencia de los recortes en los sueldos, la bajada generalizada de ingresos o el desempleo.

LOS HIJOS // Otro elemento sobre el que el experto de Martínez--Echevarría llamó la atención es sobre el efecto negativo que sobre la salud de los hijos puede tener litigiar un divorcio en los tribunales. "Existen estudios que alertan de que los hijos de padres divorciados de forma no consensuada soportan una tensión mayor que los de padres que se divorcian de forma consensuada, lo que les provoca más enfermedades relacionadas con el estrés, como la dermatitis atópica y el asma infantil", aseguró Agustín Azparren.