María José Ruiz López (Montilla, 1966) ha sido reconocida con el premio Cordobeses del Año en la categoría de Valores Sociales, en concreto, en el ámbito cultural. La pintora reconoce sin ambages la alegría que le ha supuesto la distinción: «Como dice el genial Antonio Gala: ser de Córdoba es una de las pocas cosas importantes que se pueden ser en este mundo y, para mí, ser cordobesa del año es un honor tan grande que no se puede expresar con palabras». En opinión de la premiada, «Córdoba ha hecho tanto por la cultura universal que llevar un premio con el adjetivo cordobesa es una responsabilidad que me acompañará el resto de mi vida. Solo espero estar a la altura de este galardón, que agradezco de corazón a Diario CÓRDOBA».

María José Ruiz atesora un rico curriculum vitae que da cuenta no solo de su pasión, la pintura, sino de sus amplios conocimientos humanísticos: es licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla y en Derecho por la de Córdoba. Su brillante carrera pictórica se ha basado principalmente en el dominio de la técnica y el color para dar forma a un figurativismo minucioso e hiperrealista, con elementos simbólicos, que le ha dado un amplio reconocimiento y proyección internacional, especialmente en la faceta del retrato. Desde 1997, año en que expuso en la basílica de San Juan de Letrán de Roma, sus cuadros han sido mostrados en Italia, Francia y distintos puntos de España, además de Córdoba y su ciudad natal. Los muros de las catedrales de Córdoba, Toledo y Moyobamba (Perú) exhiben alguna de sus obras, así como el Pontificio Colegio Español de San José de Roma, el Ayuntamiento de Nuremberg, el Centro de Arte Contemporáneo de Cittanova (Italia), la Accademia Internazionale dei Micenei (Italia), la Fundación Focus Abengoa (Sevilla) o la Fundación Rafael Botí. Es autora, además, del retrato de San Juan de Ávila que el Ayuntamiento de Montilla entregó al Papa en abril del 2015. Ese mismo año, el Pontífice eligió como imagen mundial de Santiago Apóstol, en la festividad del santo, el retrato realizado por la artista cordobesa, quien en octubre resultó ganadora del Primer Premio Internacional de Pintura Gran Capitán, con un óleo de gran formato en el que aparecía la figura ecuestre de Gonzalo Fernández de Córdoba.

Posee también los premios Garnelo y Nacional de Pintura Pedro Bueno, entre otros. En el 2016 expuso con gran éxito en Nüremberg una retrospectiva en la que pudo verse la serie Blanco roto, en la que se adentraba en la violencia de género. En el año 2016, María José Ruiz fue la autora del cartel anunciador de la Feria de mayo, que por primera vez en la historia colocaba como figura central a un hombre.