Va por usted, presidente. Va por usted, jefazo, para que siga manteniendo este equipazo, que no ganará la Vuelta (nunca se sabrá si por la pifia o fallida de Enric Mas el miércoles), pero que, al final, le ha podido dedicar a usted, don José María Álvarez-Pallete, este triunfo a lo grande, a lo bestia, sí, cierto, es verdad con un colombiano, ese monstruo llamado Miguel Ángel López, más conocido por 'Superman', que, quien sabe, igual fue el elegido ya que usted, señor presidente de Telefónica, iba acompañado en el coche de su equipo, nada más y nada menos, que por el máximo responsable de su compañía en Suramericana y, por tanto, todo queda en casa.
Ya lo dijo Enric Mas en meta: “Hoy era el día que teníamos que ganar porque estaba nuestro presidente en la carrera, en el coche de nuestro director”. Pues eso, así se escribe la historia. Movistar, pese a quedarse sin su mejor gregario, Carlos Verona, hace un ‘etapón’ y consolida el podio, con el mallorquín y el colombiano flanqueando a uno de los tres monstruos del ciclismo mundial Primoz Roglic (más, cómo no, Tadej Pogacar y Egan Bernal).
Un año sin ganar
Ese suele ser el destino de ‘los otros’. El podio. Conformarse, consolarse, con estar, con aparecer, en las esquinas de la fotografía, pero no pudiendo acaparar el centro de la imagen. Ni siquiera ¡que ya es! como ganadores de etapa. Lleva el ciclismo español todo el año sin ganar en una etapa en una gran ronda y, hoy, de nuevo, ha chutado al poste.
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Lleva España sin un ganador ‘grande’ desde Formigal (Vuelta-2020) a manos de Ion Izaguirre. Y, hoy, un enorme catalán (de Sabadell), treinteañero, David de la Cruz, quiso pisar el cielo de Asturias, que es como llaman todos al majestuoso Gamoniteiru (1.772 metros, 14 kms a una media de 10% de desnivel), pero no tuvo fuerzas suficientes para llamar a la puerta de San Pedro. Sí lo hizo ‘Superman’. Normal, estaba el presidente y no se podía fallar.
