Isabel y Surai sufren síntomas graves dos años después de haber superado la COVID. No son secuelas, sino un cuadro de síntomas aparecidos cuando creían superada la infección, donde la fatiga invalidante, los problemas de visión, de movilidad y cognitivos, por citar los más generales, impiden una vida normal y de calidad. Ahora un estudio científico, publicado en la revista The Lancet, sugiere que 1 de cada 8 adultos que han pasado la COVID, experimenta síntomas a largo plazo. Los afectados demandan investigación que permita avanzar en el conocimiento de la enfermedad, unidades específicas de COVID persistente en hospitales y con colaboración en Atención Primaria.