España y Francia firman un Tratado de amistad y cooperación que el país galo sólo tenía, hasta ahora, con Alemania. Esto va a suponer, por ejemplo, que algún ministro español o francés pueda a asistir, una vez al trimestre, a las reuniones de Gobierno del país vecino. También se incrementará la colaboración en todo tipo de interconexiones, desde las energéticas a las ferroviarias. Y se intentará avanzar en la apertura de los 9 puestos fronterizos cerrados desde 2021. Eso, en lo internacional, porque esta cumbre ha tenido también su clave nacional. Y más que nacional, catalana. Apenas uno minutos ha estado el presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, en presencia de Pedro Sánchez. Minutos que, sin embargo, le han servido para colocar sus mensajes. Al presidente español y luego al francés. Y básicamente ha sido para trasladar esto: el conflicto político no ha acabado pese a que se pueda decir por parte del Gobierno del Estado. Mientras, a menos de 50 metros, el independentismo se manifestaba intentando dar una imagen de unidad.