Isabel Pantoja vuelve a Córdoba para una revisión médica tras sus problemas de visión de este verano

La cantante Isabel Pantoja ha vuelto a elegir Córdoba para someterse a un chequeo médico del que no han trascendido detalles. Así, la tonadillera estuvo la semana pasada en la capital donde acudió a un centro de especialidades para someterse a unas pruebas médicas, según ha adelantado el periodista Antonio Rossi en el programa ‘Vamos a ver’ de Telecinco.

De acuerdo con el relato, la cantante abandonó su finca de Cantora al volante de su propio coche el domingo 8 de octubre. “Quería estar sola, no dio explicaciones a nadie de su familia y se dirigió a Córdoba, donde el lunes tenía previstas varias pruebas médicas en un centro de especialidades de la Junta de Andalucía”, indica Rossi. Aunque no llegó a ser ingresada, la artista se quedó toda la semana en Córdoba acompañada por una amiga y esperando los resultados de dichas pruebas, por las que, según Rossi, “estaba muy preocupada". Y ya el sábado regresó a su residencia.

Faltó a la boda de su hija

La noticia sobre la salud de Isabel Pantoja ha trascendido coincidiendo con la ausencia de la tonadillera de la boda de su hija, Isa Pantoja, con Asraf, celebrada el pasado 13 de octubre.

Ante el evidente distanciamiento entre madre e hija en los últimos tiempos, mucho se había especulado sobre la más que posible ausencia de la tonadillera en el evento.

La hija de Isabel Pantona no ha querido opinar ni sobre los motivos de la falta de su madre ni sobre su estado de salud, aunque sí ha confirmado no saber nada ni sobre el ingreso ni sobre los resultados de las pruebas.

Segunda visita médica a Córdoba

Esta no es la primera vez que Isabel Pantoja acude este año a Córdoba por motivos de salud. A comienzos de verano se supo que la tonadillera se estaba tratando en una clínica de la capital de un grave problema de salud en un ojo que casi le cuesta la visión.

Todo comenzó a principios de año, cuando estaba preparando los detalles de su mini gira por Norteamérica, al empezar a sentir molestias en el ojo izquierdo. Los síntomas eran enrojecimiento e inflamación por lo que inicialmente pensó que se trataba de una conjuntivitis. Sin embargo, los dolores que sufría la hicieron acudir al oftalmólogo y el diagnóstico fue una infección en el iris que provocó que perdiese el 80% de la visión.

En esta ocasión, el motivo de su visita médica a la capital cordobesa no tiene nada que ver con aquella afección del ojo, de la que ya está recuperada. Se trataría de otro tipo de pruebas médicas, ya previstas y programadas desde hace tiempo.