Alain Senderens, uno de los padres de la 'nouvelle cuisine', ha fallecido la noche del lunes a los 77 años. Conocido por su pasión por maridar comida y vinos (su maridaje de un vino blanco con un plato de quesos rompió moldes) y su atrevimiento a la hora de mezclar salados y dulces en un mismo plato, logró tres estrellas Michelinen 1978 al frente de Archestrate (luego Arpège) y Lucas Carton. Renunció a ellas en el 2005 para transformar Lucas Carton en un nuevo restaurante, un "restaurante diferente", más asequible, llamado Senderens.

"Hemos perdido a una de las más bellas manos de la cocina francesa. Era la precisión, la originalidad, la creatividad. Tuve delante a un pintor, un poeta", ha comentado el chef Alain Passard, que trabajó con Senderens a finales de los años 70 del siglo pasado.

RECUERDO DE FERRAN ADRIÀ

"Ha sido uno de los últimos grandes creadores de París. Fue un visionario", ha escrito el crítico gastronómico Gilles Pudlowski, uno de los más importantes de Francia. Senderens recuperó recetas angituas, como el pato Apicius rustido (de la época romana) y la langosta a la vainilla.

Este martes, en la fiesta de los 15 años de los premios 50 Best de la revista 'Restaurant', Ferran Adrià ha tenido un recuerdo para él durante su charla.