Nueve meses después de que Veronica Lario iniciara los trámites de divorcio con el presidente italiano, ambos se vieron las caras por primera vez el sábado en la audiencia de conciliación previa a la separación. Lario y Berlusconi estuvieron 20 minutos ante un juez en Milán. El iba con cuatro abogados, y ella, con uno, informó el diario Corriere della Sera. La segunda esposa de Il Cavaliere le pide una pensión de 3,5 millones de euros al mes, y él ofrece 200.000. Los escarceos de Berlusconi, cuyos abogados tienen hasta marzo para demostrar que Lario también fue infiel, son la base del divorcio.