Mucho cuidado si ves un pececillo de plata: así tienes que actuar

Este insecto puede convertirse en una peligrosa plaga en el hogar

Pececillo de plata: ¿qué pasa si me pica?

Pececillo de plata: ¿qué pasa si me pica? / G. P.

Irene Roma

El pececillo de plata, denominado de manera científica Lepisma Saccharina y también conocido popularmente como 'sardineta' o 'bicho de la humedad', puede convertirse en una importante plaga en el hogar.

Es habitual ver estos insectos en las casas debido a que se han adaptado a vivir en las instalaciones en las que están presentes los humanos, especialmente en las zonas más oscuras y con más humedad, como baños, sótanos o cocinas. No es extraño, puesto que su fuente de alimentación principal es el almidón y son muchos los productos que contienen esta sustancia. Así, allí donde haya una buena cantidad de papel, silicona, moho, azúcar, pelo, suciedad o incluso tejidos como algodón, lino o fibras artificiales, es común ver al pececillo de plata.

El Lepisma Saccharina tiene forma alargada y cuenta con dos largas antenas en la cabeza y un filamento como cola. Su principal característica, de ahí su nombre popular, es que todos los ejemplares son plateados al modo en que lo son los peces y que su cuerpo emite destellos de plata en función de cómo refleje la luz.

La actividad del pececillo de plata se concentra sobre todo por la noche y sus nidos y escondrijos suelen estar en grietas y hendiduras, por eso es habitual encontrarlos cerca de los rodapiés o los marcos de puertas y ventanas. Allí pueden encontrar refugio fácilmente en cuanto detectan presencia humana.

Los adultos pueden llegar a vivir hasta 8 años y las hembras ponen hasta 100 huevos en cada ocasión. Su lugar preferido son las pequeñas grietas, ya que en ellas puede depositar a su prole sin temor a que sea vista.

La picadura del pececillo de plata

El pececillo de plata puede convertirse en un auténtica y peligrosa plaga en el hogar o en lugares en los que hay mucha acumulación de papel, como bibliotecas o instituciones públicas. Como huye de la luz, es fácil encontrarlo en lugares oscuros y húmedos, o bien durante la noche. Es precisamente entonces cuando puede acercarse más al ser humano debido a que éste permanece inmóvil mientras descansa.

Y, ¿si se acerca y me pica, qué puede ocurrir? El pececillo de plata es un insecto inofensivo en este sentido debido a que no produce picaduras en el ser humano. Los riesgos que conlleva su presencia son otros ya que, como te indicábamos más arriba, puede convertirse en una plaga con funestas consecuencias si hay el suficiente número de ejemplares.

Así, aunque el pececillo de plata no pique, lo cierto es que puede ocasionar importantes daños económicos al infectar alimentos, atraer otros insectos o comer productos con mucho almidón, como libros o fotografías.

Cómo eliminar al pececillo de plata

Lo más importante para prevenir la presencia del Lepisma Saccharina en nuestro hogar es mantenerlo lo más limpio posible. Aspirar a menudo para eliminar restos de pelo, piel muerta y pelusas que se convierten en su alimento, así como mantener a raya las humedades y ventilar todos los días, aunque sólo sea durante unos minutos, son gestos que nos ayudarán a evitar la proliferanción del pececillo de plata.

Otra actuación fundamental es sellar grietas y rendijas pero no con silicona, sino con cemento o pasta selladora libre de siliconas). Así evitaremos que puedan refugiarse en esos lugares y, además, les eliminaremos una de sus principales fuentes de alimento al no tener en casa más silicona de la estrictamente imprescindible para sellar algunas partes del baño o la cocina.

También se pueden utilizar varios insecticidas domésticos que nos ayudarán a poner freno al pececillo de plata porque eliminará muchos de los ejemplares que ya estén en casa. En este caso, hay que vigilar que el producto no sea tóxico para el ser humano o las mascotas que podamos tener en casa.