La sequía amenaza el alimento más consumido en España

Tras el verano, los pantanos se encuentran en estado crítico que puede afectar seriamente a la alimentación española

El alimento estrella del supermercado, amenazado por la sequía

El alimento estrella del supermercado, amenazado por la sequía / wirestock | Freepik

La AEMET acaba de realizar una de las predicciones más aterradoras sobre la sequía: uno de los mayores problemas a los que nos vamos a enfrentar en los próximos años. Si la guerra en Ucrania o la subida de los precios de combustibles y energía, la escasez de agua amenaza con otro episodio de escasez e inflación. Aunque prácticamente todos los alimentos requieren agua para su producción, existe uno especialmente vulnerable que todo el mundo en España consume en su dieta habitual.

La sequía llega a los supermercados en España

Según los últimos datos de noviembre, los embalses y pantanos españoles están al 34,3% de su capacidad, y aunque esto representa una ligera mejor frente a las semanas inmediatamente anteriores (de un 1,4%) todavía estamos muy lejos de recuperar el 51,25% de capacidad del que disfrutábamos hace diez años.

Y no solo estamos lejos de volver atrás, sino que el futuro no se presenta nada esperanzador en lo que a escasez de agua se refiere: los modelos que predicen distintos escenarios sobre el cambio climático no pronostican un aumento de las precipitaciones para la Península Ibérica, al contario, se espera que los periodos de sequía sean más largos y prolongados (en paralelo al aumento de las olas de calor) y que las lluvias, cuando las haya, sean cada vez más torrenciales y destructivas.

La víctima principal de la sequía es el supermercado: si en el último año hemos visto subidas de entre un 10% y un 30% en la cesta de la compra, todavía no sabemos qué puede ocurrir cuando el agua empiece a escasear de verdad.

Fernando Valladares, profesor de Investigación en el Departamento de Biogeografía y Cambio Global en el Museo Nacional de Ciencias Naturales publicó el pasado septiembre un estudio en The Conversation donde concluía que Europa nunca había sufrido una escasez de agua como la que vivimos actualmente y que "Tiene consecuencias directas sobre nuestra vida, entre otras cosas, porque amenaza productos alimentarios básicos como la leche. Recordemos que una vaca necesita más de 100 litros de agua al día para producir leche, y que últimamente se han cerrado granjas incapaces de competir con las macrogranjas por los precios”.

Así, la leche podría ser el producto que más escaseé por culpa de la sequía y a su vez el que suba más de precio.

Embalse en Ávila, afectado por la sequía

Embalse en Ávila, afectado por la sequía / Pedro Armestre