Entrevista | Claudia Araceli Alvarenga Ramírez Estudiante con discapacidad de la Universidad de Córdoba

«A veces el mayor freno son los propios miedos»

Esta joven estudiante de 2º curso del Grado en Traducción e Interpretación es ciega de nacimiento

Araceli Alvarenga ha encontrado la forma de que el inglés esté presente en su vida.

Araceli Alvarenga ha encontrado la forma de que el inglés esté presente en su vida. / CÓRDOBA

Araceli Alvarenga nació en Paraguay, pero con dos años y medio se trasladó a España con su familia. De pequeña quería ser profesora de inglés, pero por su ceguera -tiene circuplasia del nervio óptico en ambos ojos-, optó por la traducción e interpretación. Lo que sí tenía claro, es que quería estudiar.

-Estudia Traducción e Interpretación. ¿Es lo que siempre quiso hacer?

-De pequeña yo quería ser profesora de inglés, pero luego me dijeron que no sería muy viable con mi ceguera y entonces dije, pues voy a traducción y tampoco descarto en el futuro una academia de idiomas, pero más por el tema de traducción y trabajar de cara al público.

-¿Cuenta con apoyos suficientes para desarrollar tus estudios?

-Sí, la verdad es que sí. Desde Atención Inclusiva informan a los profesores para adaptar los apuntes, y si se les pasa, se lo pido a los compañeros y ellos me mandan una foto y yo lo paso a texto y así.

-¿Sabía que la UCO tiene un Área de Inclusión?

-Sí, me habían hablado de ella en Orientación de la ONCE.

-¿Se ha sentido bien acogida en la Universidad?

-Es verdad que hay cierto tema de «yo no sé cómo tratar a esta compañera», pero yo siempre he tratado de ser lo más abierta posible. Hay gente que le da mucha cosa decir persona ciega y dice, persona invidente, personas como tú. Yo no tengo tapujos con mi ceguera ni en contestar a lo que me pregunten. Me siento integrada en clase, aunque es verdad que soy más silenciosa (se ríe).

-¿Cuáles son las mayores dificultades que se ha encontrado?

-Mayormente, organizarme yo misma. Lo laberíntico del edificio, llegar a tiempo a las clases, que siempre llego tarde (se ríe).

-El acceso de personas con discapacidad a la universidad sigue siendo un reto. ¿Qué cree que frena ese acceso?

-Yo creo que influyen las inseguridades de la persona y de las familias, sobre todo, si tienen que estudiar fuera, como es mi caso. Muchas familias piensan cómo su hijo o hija no va a poder ir solo o sola, cómo va a vivir en un piso sin su ayuda. En mi familia hemos tenido ese temor. Soy independiente, pero tiro mucho de mi familia. Yo creo que a veces el mayor freno son los propios miedos e inseguridades.

Tracking Pixel Contents