La pandemia del covid-19 dio al traste con la celebración del 40 aniversario de la Facultad de Derecho y Ciencias Económicas y Empresariales que, no obstante, y dos años después, ha querido aprovechar la conmemoración de sus patrones, San Raimundo de Peñafort y San Vicente Ferrer, para celebrar dicho aniversario, al que ha dedicado también su semana cultural -en realidad son dos semanas de intensa actividad cultural y académica-.

En el acto central de la fiesta patronal, que contó con la presencia del rector de la Universidad de Córdoba, José Carlos Gómez Villamandos, la facultad aprovechó para entregar al Colegio de Abogados de Córdoba una distinción por los 200 años de vida que cumplió en 2020, un galardón que el presidente del órgano colegial, Carlos Arias López, recogió con satisfacción personal «puesto que pertenezco a la primera promoción de esta Facultad que recibió el título oficial expedido por la Universidad de Córdoba».

40+2 años

Asimismo, y en el marco de la conmemoración del 40+2 aniversario, Miguel Agudo Zamora, profesor de Derecho Constitucional y, hasta la fecha, el decano que ha ejercido dicho cargo durante un periodo más largo, compartió su visión de los cuarenta años de vida de la Facultad. El actual Defensor Universitario ha destacado los hitos del centro desde su creación en el curso académico 1971-72 en la Sección de Derecho del Colegio Universitario de Córdoba, adscrito a la Universidad de Sevilla. En concreto, ha destacado la mudanza en 1983 desde la sede de la Facultad de Filosofía y Letras a la actual, el antiguo Convento del Carmen Calzado de la Plaza Puerta Nueva; la inauguración en 1994 de la ampliación de la Facultad con un edificio anexo, la incorporación en 2007 del nuevo Grado en Administración de Empresas y la creación del primer doble grado de la UCO, el de Derecho y ADE; y la incorporación en 2008 al Espacio Europeo de Educación Superior.

Conferencias, presentaciones de libros, charlas sobre salidas profesionales, talleres, jornadas de voluntariado, la Fiesta del Libro, la inauguración de la Biblioteca Carbonell... han sido muchas las actividades realizadas que demuestran que el centro con más alumnado de la UCO ha recuperado prácticamente la normalidad tras la pandemia.

«Hemos vuelto a la normalidad, si no al 100%, al 85%», afirma su decano, Luis Miranda que pone como ejemplo la recuperación de la movilidad internacional de los estudiantes y que las clases ya son todas presenciales, además de la recuperación de las actividades extra académicas en gran parte, gracias al esfuerzo de la vicedecana de Estudiantes y de Vida Académica, Amalia Hidalgo Fernández. «Yo estoy muy contento porque ha habido una respuesta del alumnado enorme», comenta Luis Miranda, que afirma que «los alumnos tienen ganas de salir de la rutina de las clases, de formarse, de ir viendo sus futuros profesionales y para mí ha sido muy satisfactorio».

Miranda espera poder celebrar el próximo curso el ya tradicional concurso de peroles como culminación de la semana cultural porque será señal de que ha logrado recuperar la normalidad.

Despachos

Hace tiempo que la facultad adolece de espacio, una cuestión que ha centrado gran parte de los esfuerzos del equipo decanal. Primero se remodeló el salón de actos, convirtiéndolo en un aula magna más funcional y creando dos aulas. Después, en unos sótanos, se crearon dos aulas para clases de máster y en marzo se inauguraron 14 nuevos despachos -la mitad de uso individual y la otra compartidos- en el llamado Patio de los Cipreses que han venido a aliviar en parte la mencionada falta de espacio.

El gran proyecto de ampliación

Salvado el escollo del informe favorable de la Delegación de Cultura de la Junta, el gran proyecto de ampliación de la Facultad solo está pendiente de conseguir la financiación suficiente para hacerlo una realidad. Por ello, el decano Miranda espera que «el nuevo rector o rectora que salga de las elecciones del próximo 19 de mayo impulse económicamente el proyecto y se pueda hacer realidad. Es lo que voy a pedirle a ambos candidatos cuando nos visiten en la campaña electoral».

Ahora queda encontrar la financiación para llevar a cabo las obras de este nuevo edificio, que rondarán los tres millones de euros y la licitación de las mismas.

El futuro edificio que, según Miranda, vendrá a solventar para las próximas décadas «los problemas de espacio que tiene la facultad», se ubicará en la parte delantera del centro, frente a la fachada principal, que no se va a tocar. «Es un edificio moderno, que no eclipsará al antiguo porque tendrá solo dos plantas mientras que el actual mantiene sus tres plantas», recalca el decano quien explica que ambos edificios «se comunicarán con una serie de pasarelas y que quedará un patio entre ambos, con los magnolios y cipreses, recordando al jardín actual»

El proyecto de Clemente Lara, que ha tenido muy buena acogida por la Junta de Facultad y ha superado ya el examen de Cultura, que solo ha pedido unos retoques al proyecto que ya han sido realizados, permitirá al centro acoger más alumnos de Administración y Dirección de Empresas (ADE) y «hacer más cosas» a una facultad que acoge a 2.600 estudiantes porque «ahora no tenemos mayor cabida».