Tras ser elegido en noviembre, afirmó que una de sus prioridades es «reconstruir el Ceuco y las dinámicas que se han perdido a causa del covid». ¿A qué se refería?

Las dinámicas que se han perdido son todas las relacionadas con el trabajo presencial y tradicional, que son reuniones, grupos de trabajo, comisiones, etc., además de los lazos de amistad que son tan importantes en nuestra labor y que es complicado establecer a través de un monitor. Pensamos recuperar todo esto reenfocando nuestra forma de trabajar, apostando muy intensamente por la presencialidad y el trabajo codo con codo (siempre con la debida precaución), abriéndonos e involucrando a muchos más compañeros y dignificando la labor altruista de los representantes de estudiantes. Quiero que mi mandato como presidente de Ceuco siente las bases de un consejo participativo, abierto y transparente, que pueda seguir creciendo en los años venideros.

Accede a la Presidencia del Ceuco en un momento complicado y no solo por el covid. Me refiero a la Ley de Universidades que tan poco respaldo ha recibido.

Tenemos gente muy preparada en política universitaria. Nos apoyaremos en ellos y formaremos aún más gente para actuar a través de las asociaciones de ámbito estatal, en algunas de las cuales, como CREUP, contamos con miembros de nuestra mesa en la Comisión Ejecutiva Ampliada, precisamente tratando temas cómo la LCU, LOSU, los R.D. de Becas, etc. Del mismo modo que pretendemos hacer de Ceuco a nivel interno un espacio participativo, extenderemos nuestra participación activa, no solo nuestra presencia, más allá de la UCO y en todos los ámbitos que podamos.

¿Cuáles son sus principales preocupaciones ahora?

Me preocupa especialmente la salud mental de los estudiantes, sometidos al estrés típico de los estudios y al provocado por la pandemia, un cóctel que a veces puede sobrepasarnos, y la falta de espacios y organización en algunos centros docentes. Están en el horizonte las elecciones a rector, que son una gran oportunidad para todos los colectivos de la Universidad y que como estudiantes seguro que sabremos aprovechar.

¿Cree que el estudiantado valora suficientemente la labor de la representación estudiantil?

Como decía, es necesario dignificar nuestra labor aún más, pues si bien no somos objeto de denostación ni de odio, en muchas ocasiones, como consejos de estudiantes, somos grandes desconocidos para el estudiantado, a pesar de que siempre hemos estado y estaremos a su servicio. Esto no es necesariamente un defecto; la figura del representante de estudiantes típico es discreta, es una persona que no presume de logros, sino que su mayor recompensa y orgullo es el trabajo bien hecho.

¿Qué cree que le aportará su experiencia al frente del Consejo de Estudiantes de la EPSC en la Presidencia del Ceuco?

Haber conocido a tantas y tan diversas personas siempre nos abre la mente y nos enseña nuevas formas de trabajar y aprender. El CEEPS me ha formado como lo que soy ahora y creo que todo el bien que pueda hacer por la Universidad se lo debo a lo vivido con mis compañeros, tanto en los buenos como en los malos momentos.