El torero Miguel Angel Perera, que el pasado día 15 de septiembre sufrió dos gravísimas cornadas en el abdomen en Salamanca, fue dado de alta ayer en el hospital de la Santísima Trinidad de la capital salmantina, según informó el doctor Luis Ortega, cirujano jefe del coso de La Glorieta.

Perera salió del hospital a primera hora de la mañana acompañado de su esposa, Verónica Gutiérrez, y sin hacer declaraciones a los medios, aunque, según palabras del doctor Ortega, su evolución ha sido "tan favorable" en los últimos días que "lo más apropiado" es que continúe la recuperación en su domicilio.

Ortega opina que, si no hay ningún contratiempo, el torero de La Puebla de Prior (Badajoz) podría estar ejercitándose "en 15 días", algo que denota la buena recuperación que está llevando, aunque ha preferido no vaticinar nada sobre si podrá volver a torear antes de que acabe la campaña.

"Lo veo muy difícil por lo poco que le queda ya a la temporada, pero con los toreros todo puede pasar, eso ya depende de él", ha concluido Ortega. Perera ha permanecido ocho días ingresado en el hospital de la Santísima Trinidad de Salamanca, los dos primeros en la UCI.