José Tomás acudió ayer a una revisión médica rutinaria en una clínica de Cádiz, debido a la fuerte voltereta que sufrió en la tarde de su reaparición, el pasado sábado en Valencia, que le produjo "una cornada envainada en el antebrazo izquierdo", señaló ayer a la agencia Efe su apoderado Salvador Boix. Tomás resultó volteado por su segundo toro, de la ganadería del Pilar, en el prólogo de la faena de muleta, cuando al tratar de empezar su labor por estatuarios, el astado no hizo caso al engaño, y arrolló al torero, lanzándolo por los aires. En un primer momento parecía que todo había quedado en el tremendo golpe que sufrió, pero una vez finalizado el festejo, y tras ser revisado en la enfermería, tuvo que acudir al hospital provincial de Valencia para ser intervenido. Según Boix, José Tomás se encuentra "bien", ya que la cornada "no fue tal", sino "un golpe seco que sufrió con el pitón cuando fue arrollado", que le produjo "una pequeña herida envainada y un leve desgarro en el antebrazo", señaló el apoderado. En ningún momento se han alterado sus planes de entrenamientos y de preparación para los siguientes compromisos, dijo Boix.