Un hombre de unos 40 años de edad aproximadamente ha fallecido tras sufrir quemaduras en el 70% de su cuerpo al provocar una explosión en su vivienda de Águilas el pasado sábado. El trágico suceso se inició con un posible caso de violencia doméstica en el domicilio de la víctima, cuando esta agredió presuntamente a su madre. Este hecho motivó la alerta a la Policía Local y a la Guardia Civil, que se personaron en la vivienda con sendas patrullas.

El hombre, que según fuentes cercanas al caso tenía antecedentes por violencia doméstica e de autolesiones, se atrincheró en su dormitorio a la llegada de los agentes, bloqueando la entrada para que no pudieran acceder al interior. La víctima, que no se mostró receptiva en un principio a dialogar con las fuerzas de seguridad, cortó previamente la goma de la bombona de butano de la vivienda y, con la boquilla abierta, la introdujo en el dormitorio con él.

Los agentes, al escuchar un silbido similar a una fuga de gas, proceden a desalojar la vivienda y piden la intervención de los bomberos. Entonces, los agentes desconocían si la intención de la víctima era intoxicarse con el gas o producir una deflagración. Ante es temor, la policía tomó las medidas de seguridad necesarias en el edificio e insistieron en dialogar con el hijo para que depusiera su actitud.

Tras una conversación con los agentes, la víctima procede de forma voluntaria a abandonar el dormitorio por una de las ventanas. Pese a esta primera actitud de colaboración, el hombre cambio de opinión, apuntan dichas fuentes, y amenaza con incendiar la casa con un mechero que portaba en el bolsillo, el cual muestra a los agentes de forma amenazante. La explosión de la botella de butano finalmente se produce por causas que aún se desconocen, provocando una deflagración que incendia el dormitorio.

El suceso, que pilló a los agentes por sorpresa, no causó lesiones a ninguno de ellos tras guardar una distancia prudencial con la habitación donde se atrincheraba la víctima. El hombre fue trasladado al Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia con quemaduras en gran parte de su cuerpo, heridas que finalmente le provocaron la muerte tras ser ingresado.