Una mujer de 50 años y con numerosos problemas de salud es encontrada inconsciente de madrugada en el baño de su casa por su madre y por su hijo. Cuando el personal sanitario llega al lugar, éstos observan que presenta un fuerte traumatismo en la cabeza. Podría ser debido a una caída accidental tras haber perdido el conocimiento, pero cuando tres días después la mujer fallece en el hospital y los médicos forenses del Instituto de Medicina Legal realizan la pertinente autopsia al cadáver, los especialistas descartan que se trate de una muerte natural o accidental. Al mismo tiempo el grupo de Homicidios de la Policía Nacional averigua que la víctima había tenido un enfrentamiento esa noche, horas antes de ser encontrada inconsciente, con un hombre en la terraza de un bar del valenciano barrio de Campanar.
El crimen se produjo hace justo tres años, el 24 de marzo de 2019 en la calle Sierra Martés. Las indagaciones e informaciones recabadas por los investigadores concluyeron que la mujer fue pisoteada de forma brutal en la cabeza estando indefensa en el suelo por su agresor, quien ahora se enfrenta a una pena de nueve años de prisión por un delito de homicidio, según la petición del Ministerio Fiscal, e incluso de hasta veinte años de cárcel por asesinato, según reclama la acusación particular.
Por su parte la defensa del acusado solicita la libre absolución al considerar que no existe una causa directa entre el fallecimiento y la agresión sufrida tres días antes, y en todo caso los hechos serían constitutivos de un posible delito de homicidio imprudente al no tener su cliente intención alguna de acabar con su vida.
No lo entiende así la Fiscalía, que sostiene que el acusado, de 39 años, pisó con fuerza la cabeza de su víctima, estando ésta en el suelo, «con ánimo de causarle la muerte o, al menos, sin dejar de representarse la gran probabilidad de que ese fuera el desenlace de su acción». Como consecuencia de esta agresión la mujer sufrió un traumatismo craneoencefálico con hematoma epidural, que le provocó un efecto depresor sobre centros neurológicos y con ello su muerte.
La Fiscalía solicita nueve años de prisión por homicidio con una eximente incompleta por sus adicciones
El fiscal aprecia la agravante de abuso de superioridad y la eximente incompleta de alteración psíquica ya que el acusado tenía su "voluntad mermada a consecuencia del inadecuado control de sus impulsos" por su adicción a las drogas, el alcohol y el juego.
Los hechos, que serán juzgados la semana que viene por un jurado popular, se produjeron la noche del 24 de marzo de 2019 cuando la víctima se encontraba con una amiga transexual bebiendo cerveza y 'barrejat' —mezcla de cazalla y mistela— en un bar de la calle Sierra Martés de Valencia. Por causas que se desconocen se produjo una discusión entre éstas y el acusado, en el que mediaron insultos y hasta el lanzamiento de parte del mobiliario de la terraza del local.
Estando indefensa
Después de finalizar la pelea y cuando el procesado se disponía a entrar en su domicilio junto a su pareja, se cruzó de nuevo con ambas mujeres. En esta segunda discusión el acusado se bajó los pantalones y les mostró las nalgas en señal de burla. Tras insultos cruzados, Javier V. F, salió del portal y presuntamente comenzó a golpear a una de las mujeres, hasta que ésta cayó abatida. Estando ya indefensa, le pisó con fuerza la cabeza contra el suelo.
Cuando recuperó el conocimiento, la víctima, todavía aturdida, no quiso recibir asistencia médica alguna y se negó a ir al hospital. Tres horas después se desplomó en el baño de su domicilio.
