Una mujer, herida grave al ser atacada por su propio perro en Palma

Una mujer de mediana edad resultó herida de consideración la pasada semana tras ser atacada por su propio perro en Palma, un animal de raza potencialmente peligrosa, en su domicilio de la barriada de es Camp Redó. La víctima no tenía licencia para tener animales de esta clase. El perro, un cruce de pitbull y american stanford, no tenía chip, fue trasladado al centro municipal de Son Reus para pasar la cuarentena.

Los hechos, según informa la Policía Local de Palma, ocurrieron el pasado día 17 a las ocho de la tarde, en un domicilio de la calle Jorge Sepúlveda, en la barriada palmesana de es Camp Redó. La sala del 092 recibió una llamada urgente para acudir al lugar, ya que un perro agresivo había atacado a su dueña y a otro can, y la mujer estaba herida. Cuando los policías llegaron al domicilio se encontraron con el hermano de la mujer herida, que acababa de llegar y estaba poniendo el bozal al perro. La mujer llevaba el brazo envuelto en trapos ensangrentados, y explicó que poco antes el animal la había mordido a ella y a otro perro de su propiedad, de pequeño tamaño y raza shih tzu. La mujer tuvo que ser trasladada en ambulancia a Son Espases.

Una vez controlada la situación, los agentes contactaron con la pareja de la víctima, que les explicó que el perro es un cruce de razas pitbull y american stanford, por lo que tiene consideración de animal potencialmente peligroso. Añadió que hacía solo dos meses que lo tenían, y que se lo había regalado un conocido. El animal no tenía chip, ni cartilla de vacunación, y sus dueños no tenían la licencia para tener perros potencialmente peligrosos.

La Policía solicitó la intervención de operarios del centro municipal de Son Reus, que se hicieron cargo del perro y lo trasladaron al refugio de animales, donde deberá pasar una cuarentena. La pareja de la víctima manifestó que no querían tener al animal en su casa.

Al día siguiente la Policía Local contactó con la dueña del perro, y confirmó que el animal no tenía chip ni cartilla de vacunación y que ella no tenía el certificado de capacidad física y psicológica para tener esta clase de perros.